Encuentran un caimán de casi un metro en una balsa de agua en Toledo

El dueño de la finca, Beni, telefoneó con evidente nerviosismo ya que en un principio pensó que un cocodrilo se había colado en su balsa. Sin embargo, cuando el reptil fue recogido por agentes de la Guardia Civil y por personal especializado del Safari Madrid y de la Fundación Zoo Koki, de Toledo, se comprobó que se trataba de un caimán macho de unos tres kilos de peso y nada pacífico pues mordió en una mano a uno de sus rescatadores.

El caimán ha pasado de habitar en esta balsa de tres metros de profundidad, 150 metros de largo y 40 de ancho a ser atendido por Safari Madrid donde se le ha colocado un microchip para su futura identificación. Según los rescatadores de la Fundación Zoo Koki, «ha sido una experiencia única capturar a este joven caimán de anteojos, una especie fascinante aunque común en el mercado de mascotas y que probablemente haya sido ese su origen».

«Rescatarlo fue una auténtica odisea y un desafío titánico y supuso muchos intentos fallidos, inmersiones y varias estrategias de captura pero al final logramos el objetivo», explican desde esta fundación fundada en 1990 por tres hermanos extremeños y que se dedica a la conservación y protección de la fauna salvaje. Actualmente alberga más de 150 especies de aves, mamíferos y reptiles de cuatro continentes, así como más de 300 especies de plantas.

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Una vez rescatado este caimán, al que no se le ha puesto nombre, el SEPRONA investiga si fue abandonado por su dueño o bien se escapó de su hogar en busca de aventuras.

A raíz de este hecho, la Fundación Zoo Koki ha hecho un llamamiento público para reflexionar antes de adoptar una mascota exótica. Según sus responsables, «cada especie tiene necesidades únicas para su bienestar y antes de tomar la decisión de tener un animal exótico hay que investigar y asesorarse sobre su hábitat, alimentación, interacciones sociales y necesidades médicas».