Estados Unidos impulsa por la vía de urgencia una vacuna experimental contra el ébola

60 componentes del personal sanitario han fallecido por el brote de ébola en África. En total, el virus ha contagiado a más de 1.300 personas y se ha llevado por delante a 826 según las últimas cifras ofrecidas el 30 de julio por la Organización Mundial de Salud (OMS). El caso que más ha impactado es la pérdida de Sheik Umar Khan, un destacado doctor de Sierra Leona, también fallecido tras contaminarse mientras trataba a pacientes infectados. El ébola, que no tiene cura, tiene una tasa de mortalidad entre el 50 y el 90% de los casos, más tendente al 90. Se trata de una enfermedad sin tratamiento y sin piedad.

Se contagia por contacto con los fluidos corporales de una persona o animal infectado. Un doctor destacado de Sierra Leona; dos médicos estadunidenses repatriados hasta una sala de aislamiento, uno de ellos parece no empeorar; un sacerdote español, quien afirma encontrarse muy mal, miles de africanos de diferentes países. Nadie está libre. El ébola, una enfermedad sin cura y altamente contagiosa, parece haberse extendido por África: en Nigeria ya se han confirmado dos casos nuevos. En Estados Unidos ya han comenzado a luchar contra el virus al aprobar por la vía de urgencia la síntesis de una vacuna experimental que será probada en humanos a partir de 2015.

La vacuna, que ha dado óptimos resultados en animales, una vez que se obtengan los permisos necesarios de la Administración de Fármacos y Alimentos, será administrada a 20 voluntarios a mediados de septiembre, ha explicado el jefe del instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, Anthony S. Fauci, al periódico The New York Times. Si es efectiva, podría administrarse a personal sanitario e individuos en alto riesgo de contraer la infección en África Occidental en algún momento de 2015, dice Fauci. Si no se hubiese aprobado la vía rápida, el fármaco no estaría disponible hasta dentro de dos años como mínimo.

De momento, los médicos americanos afirman saber cómo detener el ébola, se ha intentado y hay mecanismos que lo permiten, dice Tom Frieden, director de Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. Los científicos pretenden compensar la pérdida de fluidos hasta que el cuerpo se adapte y logre hacer frente a la enfermedad, explica Frieden.

Desde que se identificó la enfermedad en 1976 cerca del río Ébola, en la República Democrática del Congo, se han registrado 5.000 infecciones y 3.000 muertes a causa de esta enfermedad. En comparación, el VIH infecta 35 millones de personas en el mundo y se ha cobrado 39 millones de víctimas.

Quizá muchos piensen que vuelve a ser un negocio, que las vacunas llegarán cuando el contagio se ha haya controlado y que algunos se retirarán con los bolsillos llenos. Lo cierto es que el ébola mata, que no tiene cura y que se necesita ayuda.

Ya veremos cómo acaba la historia del brote más agresivo de ébola.