El asesino confeso de Málaga: «Sus compañeros dicen que ya les había anunciado que no iría a trabajar el día del crimen»
El presunto responsable, que se entregó a 150 kilómetros, en la provincia de Jaén, trabajaba en el campo
María José Díaz Alcalá, Juan Cano e Irene Quirante
Jueves, 27 de noviembre 2025, 12:31
Se llamaba Concepción -la conocían como Concha-, tenía 25 años y hacía unos meses que se había mudado a Campillos para vivir con su padre, ... natural de este municipio malagueño. El novio de la joven, detenido este miércoles por la Guardia Civil como principal sospechoso de su muerte, también convivía con ellos, según los vecinos con los que ha conversado este periódico, y era habitual verlos juntos por la calle o tomando algo en el bar. Al parecer, el día del crimen no acudió a trabajar, tal y como había anunciado a sus compañeros.
Este miércoles, ni 24 horas más tarde del día en el que se reivindica la erradicación contra la violencia que sufren las mujeres, la Guardia Civil acudía a la casa de la familia, ubicada en el barrio del Paulano, tras presentarse un joven de 28 años en el cuartel de Martos (Jaén) y confesar que podía haber matado a su novia. A la llegada a la casa, los efectivos confirmaron el fallecimiento de la chica que, a falta de la ratificación de Igualdad, se trata de la sexta víctima mortal que deja la violencia de género en la provincia en lo que va de año.
Los vecinos de Campillos no conocían demasiado a la pareja al llevar poco tiempo haciendo vida en la localidad. Pero, reconocen encontrarse «en shock» con lo sucedido. A ella la solían ver paseando con su padre y su perro; a veces, también los veían a los tres juntos en el bar de la esquina. «El domingo mismo estaba el padre y el chico sentados en una mesa, sobre las siete de la tarde», explica el dueño de la taberna.
Noticia relacionada
Hallan muerta a una joven de 25 años en Campillos en un nuevo crimen machista
Al parecer, el presunto autor del asesinato de Concha trabajaba en un cortijo y el martes avisó a sus compañeros de que no iría a trabajar al día siguiente, comentan los vecinos. Sobre las siete de la mañana del miércoles, el padre de la joven salió de la casa (también se dedicaba al campo, aunque en otra finca). A eso de las once, según algunos vecinos, observaron al sospechoso en el coche. A las una aproximadamente, los servicios de emergencias acudieron a la vivienda.
Hasta el lugar también acudió la comitiva judicial (formada por el juez, el letrado de la administración de justicia y el forense), que procedió al levantamiento del cadáver sobre las seis y media de la tarde para trasladarlo al Instituto de Medicina Legal (IML) de Málaga, donde la autopsia esclarecerá la causa de la muerte.
Por su parte, el detenido, de 28 años, se encuentra custodiado en dependencias policiales tras quedar detenido y está a la espera de ser puesto a disposición de la autoridad judicial competente.
Fuentes de Subdelegación del Gobierno en Málaga han informado de que ambos habían estado en el Sistema Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén), como víctima ella y agresor él, con anteriores parejas, pero sus expedientes estaban ya inactivos. Sin embargo, entre ellos no existían denuncias previas por este motivo.
El representante del Ejecutivo central en la provincia, Javier Salas, condenó este miércoles el crimen y expresó sus condolencias a su familia y allegados. «No podemos tolerar en nuestra sociedad que esta nueva lacra permanezca. Debemos redoblar todos los esfuerzos para que la conciencia contra la violencia machista esté arraigada en nuestra sociedad de manera permanente y la principal arma para combatirla es la educación y el destierro de los mensajes negacionistas de la violencia de género», defendió.
El alcalde de Campillos, Daniel Gómez, también expresó «la más firme condena y absoluta repulsa» ante el asesinato. «Hemos perdido a Concepción a causa de la violencia más cruel y más inaceptable. Nada puede justificar un hecho tan atroz», dijo en sus redes sociales. Asimismo, el Ayuntamiento emitió un comunicado en el que reconoce que la violencia machista es «una violación de los derechos humanos, un problema estructural que nos interpela como sociedad y que exige la unidad de todas las instituciones, partidos políticos y ciudadanía».
En esta línea, el Consistorio reafirma «su compromiso de continuar trabajando para prevenir, detectar y combatir cualquier forma de violencia contra las mujeres». «Reiteramos la importancia de la colaboración entre administraciones, la atención y protección integral a las víctimas y el refuerzo de las políticas públicas que promueven la igualdad y la erradicación de esta lacra». De esta manera, el Ayuntamiento decretó tres días de luto oficial, suspendió los actos y eventos oficiales previstos para ayer martes y convocó a la ciudadanía a una concentración con un minuto de silencio en señal de repulsa este jueves, a las 12.00 horas, en la puerta del Ayuntamiento.
Segundo caso en cuatro días
Se trata del segundo caso de violencia machista en Málaga en apenas unos días. El pasado sábado María Victoria, una vecina de 60 años de Rincón de la Victoria, era asesinada a puñaladas por su exmarido, ya en prisión provisional. De acuerdo con los testimonios recabados en la zona aquel día, se trataba de un matrimonio separado, pero ella lo visitaba y preocupaba del estado del hombre, pues se encontraba en tratamiento psiquiátrico.
El pasado viernes 3 de septiembre, Eva, de 83 años, también era asesinada en su domicilio de Marbella presuntamente a manos de su marido, quien le habría asestado al menos media decena de puñaladas. A la llegada de los agentes, ya no pudieron hacer nada por salvar su vida.
El anterior crimen, el tercero de este 2025, se produjo en Fuengirola y se saldó con la vida de Zunilda, de 43 años, a la que, supuestamente, su pareja mató a martillazos en un apartamento. Era 18 de junio y las pesquisas policiales determinaron que el hombre, al que hallaron muerto en el inmueble con heridas de arma blanca, se quitó la vida.
Solo unos días antes, el 7 de junio, los servicios de emergencias hallaron el cadáver de Pilar, de 53 años, en un descampado de Marbella. El presunto autor se entregó en dependencias de la Policía Nacional, donde confesó la autoría del crimen machista.
La primera víctima de la violencia de género registrada ese año se llamaba Catalina, aunque su entorno la llamaba Lina. Tenía 48 años y era madre de cuatro niños. Su expareja acabó con su vida el pasado 9 de febrero en su domicilio de Benalmádena. Según pudo saber este periódico, la golpeó con un puño americano y luego la estranguló delante de uno de los hijos pequeños; después, prendió fuego al inmueble para simular que se trataba de un accidente. Lina fue la única víctima que había denunciado a su presunto maltratador. Lo había hecho unos 20 días antes del crimen. El juzgado le denegó la orden de alejamiento porque la policía, o mejor dicho el algoritmo de Viogen, estimó «riesgo medio».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión