La familia del menor que denunció abusos en un colegio de Vizcaya pide al Papa que reabra el caso

"Pedimos que el Papa vea el caso y todas las pruebas que tenemos. Confiamos en él plenamente", ha dicho en declaraciones a Radio Euskadi Eduardo, el padre del alumno del colegio Gaztelueta de Leioa, de la Prelatura del Opus Dei, donde su hijo dijo haber sufrido abusos de manera continuada cuando cursaba primero y segundo de Enseñanza Secundaria y tenía 12-13 años.

La familia del menor puso su denuncia en conocimiento del Papa y éste ordenó que se instruyera juicio canónico contra un profesor y contra el colegio. El 12 de octubre el Vaticano cerró el caso por "falta de elementos", según consta en el documento que la Santa Sede envió a la Prelatura del Opus Dei en Roma.

"Pruebas más que suficientes"

El padre del chico ha puesto en cuestión esa investigación del caso ya que sólo se tomó declaración al colegio y no pudo intervenir la abogada de la familia ni se le permitió aportar pruebas y datos. En cualquier caso, el progenitor del alumno que denunció al presunto pedófilo ha reiterado que sigue "confiando en el Papa" y ha insistido en que "hay pruebas más que suficientes, si se estudian, cosa que aún no han hecho", para resolver la condena por vía canónica de ese profesor.

"Si el Papa no hiciera nada, nos llevaríamos una gran decepción como católicos que somos porque creemos que la razón nos asiste y que la verdad nos asiste", ha manifestado.

Además, ha recordado que se está investigando el caso en un juzgado de Getxo donde, después de haber tomado una primera declaración a la víctima y al supuesto agresor, se ha designado a un nuevo juez para su instrucción.

Ha confiado en que, a pesar de la filtración a los medios ajena a la familia, "la judicatura se mantenga inmune" y que el procedimiento por la vía penal se desarrolle según corresponde dentro de un Estado de Derecho.