Las heladas previstas en Sierra Nevada permitirán acondicionar las pistas de cara al fin de semana

En efecto, la estación permanece completamente cerrada a los esquiadores durante la jornada de este miércoles debido a la fuerte tormenta de agua ocurrida durante la pasada noche y madrugada.

Cetursa Sierra Nevada ha respondido a esta situación desde primera hora. Así, las máquinas pisapistas están a pleno rendimiento. Su misión principal es ahora la creación de las necesarias vías de agua en la zona de Borreguiles para drenarlas a fin de actuar lo más pronto posible para el reacondicionamieto de las pistas afectadas.

No todo son sin embargo malas noticias. La previsión meteorológica anuncia una bajada de temperaturas asociadas a nevadas durante la tarde noche de este mismo miércoles y para la jornada del jueves.

Si se cumple este parte del tiempo, «todo apunta también a que este próximo jueves y, sobre todo, el viernes, se darían las condiciones para reactivar el sistema de nieve producida. De esta forma, las heladas previstas en Sierra Nevada permitirán acondicionar las pistas de cara al fin de semana gracias a los cañones de nieve.

La estación de esquí de Sierra Nevada se cerró el pasado viernes, 9 de diciembre, debido a las fuertes rachas de viento registradas. La apertura se había pospuesto hasta las 11.00 horas, pero finalmente se decidió cerrar por seguridad, al igual que el pasado jueves 8, día de la Inmaculada y festivo, cuando tampoco pudo abrir al público por rachas de viento que alcanzaron los cien kilómetros por hora.

La estación abrió la temporada invernal 22/23 el pasado 3 de diciembre, con la apertura de cinco pistas en la zona de principiantes de Borreguiles con una longitud esquiable de 1,9 kilómetros.

Esta apertura fue sido posible gracias al sistema de nieve producida que, con los cañones de última generación instalados durante las últimas temporadas, se ha producido nieve con temperaturas marginales y se han acumulado espesores de 20 a 40 centímetros.