La polémica del cartel de la Semana Santa 'contagia' a las hermandades

Días complejos, por tanto, para el presidente de la Federación de Cofradías, Jesús Muros, y su junta de gobierno. «Es mejor no hacer declaración alguna más. Ya tengo muchos problemas para crearme más. Acato la determinación del palacio arzobispal y punto». En esos términos se manifestó el presidente a IDEAL al conocerse el contenido del decreto firmado por el arzobispo de Granada, monseñor Javier Martínez, por el que se suspendían las estaciones penitenciales. El presidente solo ha argumentado lo «mal que funciona el correo» al hecho de que el decreto está firmado el día 30 de diciembre y se recibió en la mañana de ayer.

La publicación del arzobispo llega en mitad de la tormenta de críticas por el cartel de la Semana Santa de este año. La imagen de un San José de Arimatea, 'calcado' a una imagen de la cofradía del Santo Traslado de Málaga, y la del ángel de la cofradía del Huerto de Jódar (Jaén), componen un cartel de la Semana Santa que ha sido polémico tanto por la elección de las imágenes, como por ser muy similar a un montaje que hizo un joven de 15 años en sus redes sociales.

Sin embargo, sin haberse cerrado esa herida, empiezan a supurar otros problemas. El decreto publicado ayer por el arzobispo supone la confirmación de que se suspenden las estaciones de penitencia en la calle, pero también la prórroga del plazo de vigencia de los cargos de hermanos mayores y presidentes de cofradías hasta después de Pascua de Resurrección, tal y como se establecía en el decreto del 8 de octubre último.

Al respecto, los hermanos mayores consultados por este diario han objetado que el decreto no ordena la convocatoria de cabildos. Algunos incluso lo tachan de «una falta de respeto a la Federación de Cofradías y a sus hermandades» y la «suspensión de los procesos electorales».

La junta de gobierno de la Federación de Cofradías prepara la reunión del próximo sábado en la parroquial de San Pedro y San Pablo, a las cinco de la tarde. En la misma se escucharán las objeciones de los representantes de las cofradías granadinas, hermanos mayores, ante la situación creada por la suspensión de las salidas de penitencia y la forma de hacerlo público desde el palacio de la plaza de Alonso Cano, la organización de la exposición que se habrá de celebrar en el antiguo monasterio de San Bernardo o la crisis abierta tras la polémica del supuesto plagio del cartel.

«Hay muchos hermanos mayores cansados de ir a plenos y reuniones para calentar la silla. Nos importa cobrar la subvención e imponer el horario de salida y paso por tribuna y a nivel de federación nos preocupamos poco de lo demás. De esos barros, todos estos lodos que llevamos en las últimas semanas», dice Vicente Gomáriz, hermano mayor de la cofradía del Vía Crucis. «La imagen está siendo un poco penosa», dice a IDEAL el hermano mayor de la cofradía de la Aurora, Víctor Alarcón. «Desde las instituciones públicas y eclesiásticas se viene ninguneando a las hermandades», reprochó.

Con todo el asunto del cartel y de los preparativos de actos que sustituyan a las estaciones de penitencia el hermano mayor de la cofradía de la Soledad de San Jerónimo «creo que vamos tarde y la premura de tiempo es considerable», dice Enrique Crespo. «La preocupación que veo entre los hermanos mayores es de distribución de trabajo para los próximos meses» y con respecto al cartel que recoge a su Titular, el Señor del Descendimiento, Crespo nos dice que «este asunto lo vemos con mucha pena. A la pintora creo que se lo están haciendo pasar muy mal, independientemente de que el cuadro guste o no».

Como se verán hay varios frentes en los que la federación está apagando, como puede, el fuego. Para completar la escena, la autora del cartel de la Semana Santa de 2021, Francisca Medina, hizo público en la noche del domingo una nota a los medios de comunicación en la que asegura que «para la realización de esta obra, se han utilizado diferentes bocetos aportados por la propia Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y Descendimiento del Señor. Estos bocetos han sido utilizados bajo propuesta de dicha Cofradía y con toda la aceptación de la misma».

La pintora indica «entre ellos se eligió a uno principalmente para la elaboración del cuadro, teniendo yo la iniciativa de poder modificar y personalizar a mi modo y con mi impronta la composición realizada por uno de los miembros de la Cofradía», en referencia al autor del boceto que en su día aprobó la hermandad, Patricio Carmona.

Francisca Medina señala finalmente que «la obra ha sido realizada con mucho esfuerzo, dedicación y con el máximo amor hacia el titular que he elegido como hacia todas las Cofradías de Granada» y aclara que el estipendio recibido por la realización del cuadro la va «a donar a familias necesitadas».