Los pasillos funcionan mejor

Está ubicado un lugar de relevo de costaleros por la Federación de Cofradías en la plaza del Lino, junto a la calle Alhóndiga. Los miembros de varias cuadrillas aseguran que el sitio es bueno para ello pero que debería estar acotado para el mejor acceso y organización de los mismos.

Las usan muchos granadinos y foráneos para ver cómodamente a las hermandades. En cualquier sitio acotan su zona y encuentran lugar privilegiado para ver la Semana Santa. En algunos espacios plantan su cuartel general sin importarles si estorban o no al paso de las cofradías o la visión de personas que han adquirido su abono en palcos o sillas. Es claro que la calle es de todos, pero debería regularizarse de alguna manera para no estorbar. Por otra parte, poco aportan al mantenimiento económico de las hermandades. Y ya si hablamos de las hamacas…

El silencio en las hermandades de este carácter es importante. No basta con mantenerlo al paso de los titulares sino durante todo el tránsito de un cortejo con este carácter. Lo veíamos ayer en la hermandad del Vía Crucis y el Lunes Santo con el Santo Cristo de San Agustín. Lo curioso es que donde más se rompe ese carácter es en lugares donde se presupone que los cofrades de otras hermandades deberían tener el comportamiento adecuado.

Todavía estamos sorprendidos del incremento de hermanos del Cristo del Trabajo. Se impusieron días atrás 152 medallas a hermanos nuevos y en las filas se comprobó el aumento de zaidineros dispuestos a seguir a su Cristo del Trabajo y a la Virgen de la Luz. Lo mismo pasó con el Rescate, en la que se apreció mayor participación, tanto de nazarenos como de niños acólitos que en pocos años cogerán ya su capillo para la estación de penitencia.

Es una lástima como queda la ciudad en algunos tramos del recorrido oficial. Papeles tirados, bolsas y residuos de bocadillos... Lo más sangrante son las cáscaras de pipas, sobre todo porque los paquetes actualmente casi todos tienen una bolsa anexa para ellas. Pasear por algunos lares al terminar cada jornada es como si no hubiéramos avanzado nada en la limpieza.

No sólo realizan estación de penitencia las cofradías en estos días. La hermandad del Santo Cristo de San Agustín realizó la donación del almuerzo del pasado Lunes Santo al comedor social de las Hermanas de la Caridad, de Regina Mundi, a través de su obra 'Jesús Nazareno de las Penas'. Paralelamente acordó remitir una nueva familia al economato social de las cofradías de la plaza de Fontiveros, fruto de los donativos obtenidos con el viacrucis de la hermandad en la cuaresma.