El Real Jaén recupera la ilusión y apea al CD Torreperogil del liderato

Juan Arsenal ha dotado de criterio al fútbol de un Real Jaén que ha logrado sellar su portería después de haber recibido goles en sus últimos nueve encuentros ligueros. Los de Antonio Torres han destilado, sobre todo en el segundo round, detalles del conjunto rocoso y con inagotable capacidad de incomodar al rival.

Recibidos con aplausos los jugadores. Andrés Rodríguez ha estado acompañado a su llegada al palco con la BSO, habitual antes de la pandemia, con la letra del ya clásico: «¡Rodríguez vete ya!». Una sintonía que se ha repetido durante todo el partido.

El encuentro ha arrancado con un Real Jaén interesado en llevar la iniciativa ante un Torreperogil que velaba armas bien guarnecido atrás.

Fran Hernández y Ezequiel han forjado, desde el arranque, una sociedad que ha destilado por sus botas gotas de buen fútbol. Los blancos se adueñaron del esférico. Arsenal quiere que su equipo sea protagonista.

El entrenador natural de Hellín ha revolucionado, dentro de las posibilidades que le ofrecen sus efectivos, el once. Ángel de la Calzada ha regresado a la titularidad, con tres centrales y dos laterales con largo recorrido. Ahí cobra mucho protagonismo Antonio Montiel. Aunque en ningún momento fue un dibujo rígido, permitiendo cambios en un esquema que, en algunos momentos, ha presentado una línea defensiva de cuatro o cinco.

Ezequiel ha abierto el marcador a los trece minutos tras una bella acción de Antonio Montiel por banda derecha. Talento, asociándose, que no se puede medir ni pesar. El tanto ha reforzado el plan del técnico blanco. Posesión tiránica del balón esperando que el conjunto rojillo saliera de su zona de confort. En ataque, balones largos buscando la espalda de los centrales visitantes y el puñal que representa Montiel por su banda derecha.

El empate ha podido llegar en el minuto 28 en un disparo, de más de 30 metros de Toni, que ha acabado en la madera del larguero. Pekes, en el minuto 36, ha estado muy cerca de ampliar la renta local. Pero se ha topado con 'Súper López', pleno de reflejos bajo palos. El encuentro se ha abierto y se ha librado de su rígido corsé táctico inicial. Ha ganado el espectáculo, con ambos bloques intensificando sus prestaciones ofensivas.

Al descanso, victoria por la mínima de los locales y la sensación que el segundo round guardaba grandes emociones.

Antonio Torres ha adelantado sus líneas en el segundo tiempo buscando incomodar la salida de balón local. Poco a poco el Torreperogil ha logrado su objetivo de volcar el campo sobre la portería de Ángel.

El Real Jaén es el conjunto que más tantos ha recibido en su subgrupo (24). Por eso una de las prioridades de Arsenal pasa por sellar su portería y dotar al bloque de una solidez defensiva desde la que crecer. Las precauciones defensivas se ha acentuado en el inicio del segundo tiempo.

Torres ha movido sus piezas en el minuto 54. Se marcharon Trillo y Ángel y entraron Chaquetas y Fran. Y seis más tarde fue Sergy el que entró por Javi Quesada.

En las filas locales el primer cambio ha sido el esperado, y ansiado, regreso de Julio de Dios por Juan Carlos.

El guion había tornado. El Real Jaén estaba empeñado en no jugar, ante un Torreperogil que dominaba sin lograr traducir ese control en ocasiones claras de gol. El Real Jaén necesitaba mordiente ofensiva y Arsenal ha recuperado al máximo artillero, Carlos Fernández, que regresaba tras su lesión en el hombro. Nada más entrar, un disparo suyo ha puesto en apuros a Javi López.

Ángel de la Calzada ha evitado el empate anticipándose a Chaquetas. El Torreperogil apretaba arriba cada vez con mayor insistencia.

Al Torreperogil se le escapaba el tiempo. Ha disfrutó de una larga lista de saques de esquina, pero no encontraba la fórmula del gol. Y en una contra fue Cambil el que ha asestado un golpe mortal en el minuto 85.

El tanto ha afectado a la moral visitante y el Real Jaén ha logrado dejar los tres puntos en su zurrón. El miércoles, en el feudo del Huétor Vega, tendrá otra oportunidad para seguir creciendo.