¡Que buen vasallo, si tuviese buen señor!

En este listado está el banquillero, Gonzalo Arconada, al que conocimos de su valía cuando tocó perder. Ahí se puso a prueba la calidad de su instinto, el espesor de su personalidad y la fortaleza de sus convicciones. Y el donostiarra mostró su mejor versión. Supo mantener su discurso tranquilo y transmitir seguridad a todo el que quería escucharle, cuando venían mal dadas. Tenía confianza en que, con paciencia, llegarían los resultados. Y se están empezando a ver.

También hay que subrayar el buen hacer del director deportivo, Ramón Tejada. En estos meses ha destilado su fino olfato de rastreador de jóvenes aprendices de peloteros con clase en esta categoría. Y todo con un presupuesto muy mermado. Los jugadores han estado a la altura, en lo deportivo, y ante la zozobra institucional de las últimas semanas. Y la misma reflexión se puede realizar para el resto de trabajadores (categorías inferiores, servicios jurídicos del club, prensa, buena parte de los consejeros de la entidad, etc.).

Pero la inestabilidad en la que anda inmerso el club en estos últimos meses, con enfrentamientos con las instituciones, y sin tener garantizada la viabilidad económica de aquí a final de temporada necesita de una respuesta tan inmediata como transparente.

Hay quien piensa, y con mucha razón, que Teruel debería dar un paso al frente. Que su tiempo ha terminado. Salir públicamente y decir si tiene soluciones o carece de ellas y hace las maletas.

Juan Miguel Hitos quiere recobrar el mando del club y el Ayuntamiento, por voz de su primer edil, también ha manifestado que el futuro del Real Jaén, sin Teruel, está garantizado. Si el presidente ha afirmado, por activa y por pasiva, que de llegar un proyecto sólido cedería sus acciones ¿qué problema o qué condición no cumplen Hitos y el Consistorio para que Teruel dé por finalizada su etapa?

No falta quien piensa que Teruel no existe, que son los padres, porque también prometió dar una rueda de prensa al mes para hablar de la actualidad del club y hasta ahora sólo asoma cuando quiere vender algo.