Seriedad y solidaridad, ¿es mucho pedir?
Nuestro ordenamiento jurídico está para respetarlo y hacerlo efectivo, puesto que se confecciona en base a la reflexión
FRANCISCO GÓNGORA
Almería
Martes, 18 de febrero 2020, 00:24
Nuestro ordenamiento jurídico está para respetarlo y hacerlo efectivo, puesto que se confecciona en base a la reflexión, la cercanía a la realidad y con ... la intención de garantizar la convivencia entre todos los ciudadanos de nuestro país, buscando progreso y bienestar. En materia de inmigración, los resortes se encaminan hacia la integración de las personas que llegan en la sociedad receptora, la nuestra. En medio aparece una palabra que ciertos representantes públicos no saben aplicar, como es la transversalidad. Y sí, es necesario y obligado que las administraciones públicas hagan transversales las políticas y los servicios públicos, tal y como recoge la Ley de Extranjería. No es una fórmula mágica, sino hoja de ruta.
Pero es lícita mi preocupación por la injerencia de la hipocresía. De ella surgen mensajes superfluos y estériles, como los del Defensor del Pueblo Andaluz respecto a El Ejido. Un municipio en el que trabajamos duro por la sostenibilidad social y donde tenemos claro que no puede haber una adecuada convivencia sin una plena integración. Y la integración va mucho más allá de 'arreglar papeles'. Sin duda, El Ejido necesita de la población extranjera, pero sin perder de vista que es necesaria la voluntad de la persona que migra para adaptarse y cumplir unas normas de convivencia.
El Defensor del Pueblo, de quien todos esperamos un desempeño más serio de sus funciones, debería de documentarse o, si lo prefiere, pasar unas semanas entre nosotros, para comprender que llevamos años trabajando en programas de integración dirigidos a toda la ciudadanía, al tiempo que hemos sido rigurosos en la eliminación del chabolismo, el control y seguimiento de los criterios para la elaboración de informes de vivienda y arraigo.
No me gustan los paños calientes y por eso sostengo que es necesario un mayor control en frontera, así como la expulsión de aquellos que han entrado al país de manera irregular, lo que solo genera marginalidad y problemas de convivencia. Quien no lo quiera ver, que se quede con el discurso erróneo de lo políticamente correcto. La persona que elija el discurso correcto de lo político, valga el juego de palabras, reclamará al Gobierno de España que trabaje por una inmigración regular, por la ordenación de los flujos migratorios de acuerdo a las necesidades de empleo y en pos de la persecución de tráfico ilícito de personas.
Es lícito elegir vivir una vida mejor, pero no es digno sufrir una de marginalidad por culpa de los traficantes de personas y porque los esfuerzos de la sociedad que les recibe no pueden cubrir a todos. Exijo más financiación, que no se nos castigue por ser un municipio que soporta una alta presión migratoria y que precisa de un mayor nivel de gasto/inversión para poder ejecutar los Planes Transversales.
Claramente, la aplicación del sistema lleva mucho tiempo fallando y consintiendo que se incumplan principios básicos. Tantos años de gobierno socialista de la Junta no han servido para nada, y se les llena la boca al hablar de integración, pero no ha facilitado los medios adecuados. Echo en falta mayor colaboración, más recursos educativos, sanitarios, culturales, urbanos… El Ejido ha realizado un importantísimo esfuerzo y, sin embargo, el resto de poderes públicos no ha estado a la altura. Invito por tanto al Defensor del Pueblo a que nos ayude, simplemente, a hacer cumplir nuestro ordenamiento jurídico. Seriedad y solidaridad. Espero que no sea mucho pedir.
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