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Pedigüeños, adivinos y estafadores

EL SEMANERO ·

José María Guadalupe

Domingo, 30 de junio 2019, 02:33

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Lamentablemente, en nuestro entorno, el índice de pobreza extrema no parece decrecer pese a que la economía, al parecer, levanta cabeza a juzgar por lo ... que se expone oficialmente y se visualiza en el día a día. Hay gente que lo está pasando mal; unos en la vergüenza de la intimidad y otros exteriorizando sus carencias como pedigüeños callejeros. De los primeros se están encargando bastantes organizaciones, entre ellas, de forma admirable el Banco de Alimentos, Cáritas y Cruz Roja, de los otros, personas generosas que aportan sus ayudas para aliviar la mala situación de individuos o familias castigadas por la penuria. Curiosamente, los pobres españoles salen, en menor medida, a la calle para pedir y a las rumanas con bebé, propio o alquilado, se les ve menos que hace unos años. Los que han tomado la calle, mayoritariamente, son los africanos que en la más inesperada esquina te solicitan: «Papi, ayuda 'po favó'».

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