Anunciar la miseria
Pones cualquier emisora de radio o cadena de televisión y a la que menos te los esperas te salta el anuncio de la paguita, el ingreso mínimo vital
Juan Sánchez
Almería
Lunes, 21 de julio 2025, 22:55
Con la llegada del verano los creativos de las empresas de publicidad se devanan los sexos para dar con un anuncio que sea del interés ... de la compañía o cliente anunciante y que, a la vez, capten la atención del público, que en verano suele desconectar de medios de comunicación. Recuerdo cuando la ONCE en septiembre de 1987 sorprendió con una campaña considerada por los expertos como una de las mejores del siglo XX. Se veía una enorme cola de gente en fila de uno que discurría por diferentes calles para morir en un quiosco con un vendedor de la organización y se finalizaba con el eslogan: «El cuponazo va a traer cola». Años después, en 2003, le dieron más ritmo y crearon tres spots, de los que dos de ellos eran tarareados a diario por la gente. ¿Recuerdan eso de «tengo, que tengo de tó» o el «yo te doy cremita, tú me das cremita»? Sin duda los hits de ese verano.
Pues con este trasfondo llega el Gobierno, que ha decidido aparcar sus spots de gente reventada o tapada con sábanas blancas sobre la carretera para gloria de la DGT, y en lugar de anunciar la muerte y dolor, divulgar el uso y disfrute de la miseria. Sí, el ejecutivo socialista, que si se analizan sus medidas sociales habría que calificarlo de comunista y más allá, sigue en su deseo de comprar votos y que la gente no pegue un palo al agua, que ya están el resto de asalariados y autónomos deslomándose por los más jetas. Pones cualquier emisora de radio o cadena de televisión y a la que menos te los esperas te salta el anuncio de la paguita, el ingreso mínimo vital. Se ve que en el otoño de 2022 le funcionó la cosa de cara a las elecciones del año siguiente y ahora vuelven a la carga en vez de emitir anuncios de ofertas de empleo o que, por lo menos, que motive a la gente parada a buscar trabajo.
Pero no, es más cómodo si te hacen un ingreso y te buscas con tu pareja o con tus hijos otras aportaciones estatales o autonómicas para vivir como los anacoretas o a hacer chapuzas en negro y ahondar en la economía sumergida, con la que iban a acabar. Igual deberían cerrar todas las oficinas del INEM, esas a las que llegas y está todo plagado de funcionarios que no consiguen colocar a casi nadie y que en la puerta las gestiones de administrativo las hace el guarda de seguridad. El ahorro en sueldos sería extraordinario, sin olvidarnos de las pagas extras, de las que carecemos los autónomos, al igual que de salario. Es que uno se está peleando a diario hasta con su madre para conseguir un euro y pones la radio cuando vas de camino para ver a un cliente y escuchar lo del anuncio de la paga revuelve el estómago. Por no decir otra cosa, la verdad.
De lo que se trata es de aborregar a la sociedad. Quieren controlar los medios de comunicación para que nadie saque sus vergüenzas y corruptelas y ahora anhelan seguir comprando voluntades por cuatro míseros euros. Animo al Ejecutivo, si es que no lo tiene en mente, a legalizar a todos los inmigrantes que entran de forma irregular en el territorio nacional y a darles un sueldecito para que vayan tirando mientras… No, no van a buscar trabajo. Es como un liberado sindical, ¿alguien cree que va a dejar de serlo para hincar el lomo? Pues ya está.
Es de una tristeza supina que una sociedad se tenga que mantener a base de paguitas y migajas. Luego dicen que se dispara el nivel de miseria, que hay desigualdades sociales y que se multiplican los menores y familias en el umbral de la pobreza. Si te dedicas a que la gente se acostumbre a vivir subvencionada es complicado que luego quieran sudar por un jornal. Seguro que algún socialista me saltará con que soy un antisocial, un racista y un desagradecido, además de desgraciado, pero me importa un carajo. Saben, como yo, que lo que persiguen es hacer de nuestra sociedad un rebaño de inútiles a los que se les tiene trincados de por vida por una miseria que lo único que hace es hundirlos socialmente, acabar con la poca autoestima que les queda y fomentar la holgazanería. Esta es la evolución de la que hace gala en el Gobierno, tanto el PSOE, como su socio Sumar y el resto de formaciones que les apoyan, incluida la extrema derecha de Junts.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión