Borrar

Nuestro microbioma al descubierto

Juan Antonio López González

Profesor Titular de Microbiología de la Facultad de Ciencias Experimentales de la UAL

Jueves, 31 de julio 2025, 19:42

Comenta

Aunque no caigamos en ello, nuestro cuerpo supone un planeta entero lleno de vida para los microorganismos. Nunca estamos solos del todo, aunque no haya ... nadie más en la habitación. Un ser humano adulto sano de 70 kg de peso supone el soporte vital para nada menos que 3,8 x 1013 células microbianas. Esto, para entendernos (que a los microbiólogos nos gusta demasiado la notación científica), comparando con el dato de población humana mundial, supone que dentro de nosotros viven más de 4600 veces microorganismos que seres humanos tiene el planeta. Sí, aunque parezca increíble, en notación científica, la población mundial es «tan solo» de 8,2 x 109 seres humanos en la Tierra. Por lo tanto, supone hasta 4 órdenes de magnitud menos que lo que contenemos dentro de nosotros. De hecho, aunque por «poco», incluso somos más procariotas que eucariotas. Esto es algo que puede sorprender, pero un cuerpo adulto sano está formado por unas 3 x 1013 células humanas. Por eso, las células humanas están en ligera minoría frente a las bacterias que nos colonizan. Pero estos números, son solo eso, números. Lo fundamental, es que resaltan la enorme complejidad de la vida que nos constituye. Como podemos sospechar, esta inabordable cantidad de bacterias no está formada por una sola especie. Dentro de nosotros cohabitan alrededor de 10.000 especies de bacterias diferentes que, en muchas ocasiones, solo comparten las ganas de seguir viviendo dentro de nosotros un poco más de tiempo. Para conseguir sobrevivir, muchas de estas especies, por tanto, han desarrollado estrategias eficaces. La inmensa mayoría de ellas colaboran, no solo con otras especies bacterianas, sino con nuestras células humanas para hacer de «su mundo» (nuestro cuerpo) un lugar mejor en el que vivir.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal Nuestro microbioma al descubierto