Un Palacio por todo lo alto

Ahí fue cuando descubrí la auténtica dimensión del Palacio, la gran cantidad de espacios y salas que tiene, la inmensidad de sus posibilidades, su versatilidad. Si no recuerdo mal, son siete pisos. De techos altos.

La semana pasada, al terminar el Congreso de directivos CEDE, los participantes iniciamos un largo peregrinar desde el gran auditorio hasta la flamante terraza, pasando por pasillos y escaleras, mecánicas y de a pie. Lástima que no accediéramos a su anfiteatro, en el que caben cerca de 1000 personas, y que es una joya. ¡Qué maravilla!

Tener un Palacio de Congresos y Exposiciones como el nuestro en pleno centro de la ciudad es uno de esos lujos que no sé si valoramos en su justa medida. Gracias al éxito organizativo de la Cumbre Europea de hace unas semanas ha estado en boca de todos. Para bien.

Leemos ahora que, con la presentación de los Presupuestos de la Junta de Andalucía, aparecen consignados 8 millones de euros para su reforma, que buena falta le hace. A las butacas de la Sala García Lorca y, sobre todo, al anfiteatro. Se va a cerrar, de forma que pueda acoger todo tipo de actuaciones sin que los vecinos más sensibles se vean afectados por el ruido.

A ver si se presenta el contenido completo y definitivo de esa reforma para conocer su alcance. Queremos saber si se adaptará la Sala García Lorca como Gran Espacio Escénico susceptible de acoger la representación de óperas, incluso, mejorando la acústica. Y si se dotará a las instalaciones de un espacio gastronómico de auténtica altura, y no sólo en el sentido físico de la expresión, por ser panorámico y estar en todo lo alto.

Las administraciones han batallado mucho con, para y por el Palacio de Congresos, amenazando incluso con su cese de actividades. A veces, pareció que peleaban contra, por agotar el repertorio de preposiciones. Bienvenido sea este acuerdo para su reforma, mejora y puesta a punto definitivas.