Granada y Europa

Los dirigentes de la Unión Europea alcanzaron un acuerdo el pasado 21 de julio, sobre una dotación presupuestaria de más de 1,82 billones de euros, para contribuir a la reconstrucción de Europa después de la pandemia de Covid-19 y apoyar la inversión en las transiciones ecológica y digital. Este acuerdo europeo supone que España prácticamente va a triplicar los fondos provenientes de la UE, contando la totalidad del apoyo recibido.

Tras las numerosas medidas de apoyo impulsadas estos meses, la Comisión Europea el pasado 9 de septiembre adoptó un primer informe de prospectiva estratégica, cuyo objetivo es identificar los retos y las oportunidades emergentes para orientar mejor las opciones estratégicas de la Unión Europea. Este informe le servirá de base para diseñar políticas y leyes con visión de futuro que respondan tanto a las necesidades actuales como a las aspiraciones a más largo plazo de los ciudadanos europeos.

Aprovechar esta oportunidad

D. Federico Steinberg y coautores en el informe del Real Instituto Elcano, '¿Recuperación o Metamorfosis?, Un plan de transformación económica para España', señalan que la crisis ha puesto de manifiesto nuestra vulnerabilidad con respecto a las cadenas de valor complejas y ciertos insumos procedentes de fuera de la UE.

Hay sectores que se han reforzado por el aumento de su demanda y la capacidad para responder en circunstancias complicadas, como el sector agrario y la prestación de servicios de energía, agua y telecomunicaciones. Tambien el sector sanitario, incluyendo el farmacéutico, ha demostrado su carácter crítico, tanto en sus fortalezas como en debilidades.

La crisis también está mostrando la importancia de disponer de autonomía estratégica en equipos médicos y tecnologías críticas tales como el 5G, el almacenamiento de datos o la biotecnología. Si se produce cierto repliegue de las cadenas globales de suministro y Europa activa una nueva política industrial para ganar autonomía estratégica, España tiene la oportunidad de convertirse en un foco de inversiones en sectores como el farmacéutico, la ciberseguridad y el automotriz.

Lo que está claro, es que ya antes de la crisis se avistaba la necesidad de un cambio del modelo productivo español hacia una economía más verde, más digital y más sostenible. Tras una sacudida de los cimientos económicos como la que se deriva de esta crisis, la transformación del modelo productivo se hace ahora ineludible.

Entre las áreas impulsoras para transformar nuestra industria, respaldar a nuestras pequeñas y medianas empresas (PYME) y mantener una sociedad sostenible y competitiva, Europa destaca la transición verde y la transición digital.

Pacto Verde Europeo

Se propone que el Pacto Verde Europeo se convierta en un motor de creación de empleo. La dimensión ambiental del plan de reactivación incluye también la activación de la estrategia de biodiversidad y el incremento del apoyo al desarrollo rural sostenible.

La economía circular, es uno de sus principales elementos. Se determinan cinco sectores prioritarios para acelerar la transición a lo largo de sus cadenas de valor (plásticos, residuos alimentarios, materias primas críticas, construcción y demolición, biomasa y biomateriales).

Transformación digital

La Comisión Europea establece que la profundización en el mercado único digital es una prioridad a corto plazo. En particular, el incremento de la conectividad digital, la extensión de las redes 5G, la potenciación de la industria tecnológica y el incremento de las capacidades y aptitudes digitales, el fomento de la economía de datos como motor de la innovación y la creación de empleo, y la mejora del entorno empresarial, favoreciendo la transformación digital de las pequeñas y medianas empresas de todos los sectores. Las nuevas tecnologías de salud y seguridad sanitaria se incluyen como esenciales.

El Consejo Social de la Universidad de Granada

La Universidad de Granada es una institución abierta que trabaja teniendo siempre presente su vocación de servicio a la sociedad. Nuestra Universidad representa el 6,12% del Producto Interior Bruto (PIB) de la provincia de Granada y genera el 7,77% de sus puestos de trabajo. Es un motor económico de la región, lo que junto a su capacidad innovadora y tecnológica, constituye un elemento esencial para salir de esta crisis.

El Consejo Social de la Universidad de Granada, que me honro presidir, es el órgano de participación de la sociedad en la Universidad. En nuestros plenos comparten voz los estudiantes, sindicatos, empresarios, profesionales, autónomos, egresados y representantes de las administraciones públicas y de la propia universidad.

Desde el Consejo Social, trabajamos apoyando la educación superior de nuestra Universidad, la innovación, el conocimiento, y su trasferencia a la sociedad, como nuestras mejores armas frente a este y a futuros shocks globales, y para alcanzar el equilibrio entre el bienestar social, la prosperidad económica y la sostenibilidad ambiental.

En estos meses, tendremos que seguir haciendo frente a una situación inédita, muy difícil y dolorosa para muchas familias, pero que ya cuenta con la ejemplar respuesta que está dando nuestra sociedad en su conjunto, ciudadanos, profesionales, empresarios, administraciones e instituciones.

Desde la gran capacidad, el talento y la solidaridad de Granada y de su provincia, tenemos que ser capaces de superar esta grave crisis.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, finalizaba su reciente discurso sobre el Estado de la Unión, en la sesión plenaria del Parlamento Europeo, con la siguiente frase:

«El futuro será lo que de él hagamos. Y Europa será lo que queramos que sea. Así que dejemos de infravalorarla y pongámonos manos a la obra. Hagámosla fuerte. Y construyamos el mundo en el que queremos vivir».