El efecto Ciudadanos se desvanece
La Carrera ·
rafael civantos
Viernes, 9 de julio 2021, 00:35
Sí hace unos años este partido llegó a la política española con el afán de ser el partido de la regeneración y el cambio de ... lo que había venido siendo una forma de hacer política con casi cuatro décadas de existencia. Una forma que fuese como fuese había conseguido grandes logros y gestas para los habitantes de este país y que ahora al albur de los cantos de sirena que este nuevo partido nos venia haciendo, había que liquidarla a toda costa y dar paso a este nuevo partido, que partía sin ideología y como ahora nos podemos dar cuenta sin un rumbo claro.
A nivel del Estado español, pudieron tener la llave de la gobernabilidad y desaprovecharon totalmente aquella oportunidad, pasando de tener esa llave, a ser prácticamente inservibles en el Congreso de los Diputados, perdiendo, por ese capricho de Albert Rivera, tras la repetición de la elecciones generales, la practica totalidad de los Diputados que tenían en la Cámara Baja, tras empezar el pueblo español a volverles la espalda, puesto que no era para eso para lo que los habían votado. No era para la confrontación y el bloqueo, sino para todo lo contrario de lo que estaban haciendo.
Pero ahora vemos de nuevo esa estampa de un partido moribundo que va a la deriva, como un barco sin timonel, puesto que ni Inés Arrimadas en Madrid, ni Juan Marín en Andalucía son capaces de imponer un criterio que permita dar estabilidad al partido y por supuesto a los gobiernos de los Ayuntamientos en los que participan o estaban participando hasta ahora, por está claro que sobre todo en Andalucía por la indefinición del señor Marín, desde que ocupa el sillón de la Vicepresidencia del Gobierno de la Junta, le preocupa muy poco lo que se este haciendo por parte de los Concejales de su partido en cada uno de los Ayuntamientos en los que tenían tareas de Gobierno.
Está claro que desde que el señor Marín se echó a los brazos del PP y de Moreno Bonilla, quedó evidente cual era y había sido su intención desde que anda en política, que no es otra que la de tratar de hacer desaparecer al Partido Socialista. Para ello estaba dispuesto, como así fue, de vender su alma al diablo si era necesario, con tal de que quitar de un plumazo al partido que había ganado las elecciones autonómicas, haciendo un tripartito de perdedores para poder desalojarlo de las instituciones.
Siendo esto así y siendo este partido ingobernable orgánicamente, no han tardado en empezar aparecer las salidas de todo en los distintos gobierno municipales, primero con la ruptura del pacto de gobierno que Ciudadanos tenía en Jaén con el Partido Socialista. Para poco después hacer lo mismo en la vecina ciudad de Granada con el PP, donde al final se ha devuelto la Alcaldía a la lista más votada en las pasadas elecciones municipales, que fue la del Partido Socialista.
Por lo tanto ya vemos como el efecto Ciudadanos se va desvaneciendo poco a poco, en gran medida por la incompetencia de sus líderes, tanto de los que están, como de los que estuvieron en su día, que dejaron, por su ego y cabezonería, a este partido herido de muerte, que si nadie lo remedia, en muy poco tiempo podría pasar a ser un partido extraparlamentario, que de ahí a la desaparición del mismo hay un pasito muy corto, puesto que la línea que se traza es demasiado delgada.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión