Empatía solidaria

La Unión Europea cuenta desde ayer con una política común en materia de inmigración fijada en cinco reglamentos sobre la gestión del asilo, la de ... las crisis migratorias, la trazabilidad de huellas dactilares, el control en las fronteras exteriores y la homologación de procedimientos entre los 27. El pacto, un delicado equilibrio entre posiciones antagónicas, consagra también un mecanismo para que la acogida sea compartida y la renuencia a ella precise una compensación económica. Europa es una realidad muy diversa en situaciones y actitudes sociales ante la migración. Cabe interpretar el acuerdo de ayer como una concesión a las corrientes que pretenden cerrar la fronteras de la Unión seleccionando, según nuestros propios intereses, a quienes desean entrar a vivir en nuestro territorio según los suyos y acelerando las deportaciones. Pero la política común será siempre más favorable a las aspiraciones y derechos de los migrantes que la continuidad de posiciones nacionales diferenciadas. La Unión contribuirá a que, en su aplicación, la empatía solidaria se imponga a los prejuicios. Y a que las reformas futuras comprometan a todos los Estados miembro.