La Ciudad de la Justicia que queremos

Desde hace años, todos los que nos dedicamos a la Justicia en Granada de un modo u otro alcanzamos el acuerdo de pedir que, a diferencia de otras ciudades, la Ciudad de la Justicia de Granada se realizara partiendo de los edificios integrados en el espacio urbano con los que ya contamos, remodelándolos para hacerlos más dignos, manteniendo un eje que va desde Plaza Nueva con el Tribunal Superior de Justicia y la Audiencia Provincial, Gran Vía con el edificio del Banco de España para la Fiscalía, y Caleta para los juzgados unipersonales. Es una apuesta que contó con el apoyo de todos los grupos políticos del Ayuntamiento, difícil encontrar mayor consenso acerca de un tema en la ciudad de Granada.

Sin embargo hay otra cuestión evidente, las actuales sedes judiciales están ya saturadas, motivo por el cual es imprescindible contar con algún edificio adicional, ya que la obra que se ha anunciado en Caleta no es suficiente para albergar a todos los Juzgados de la capital. El anterior gobierno de la Junta de Andalucía contaba para ello con la sede de la Consejería de Salud. La actual dirección de Justicia afirma que esa sede no es viable ya que pertenece a un fondo de inversión que dentro de unos años lo quiere explotar directamente. En esta situación han pasado casi dos años en los que no se ofrece una solución alternativa, pese a las sugerencias que hemos realizado para que se contacte con otras administraciones titulares de inmuebles o solares cercanos a fin de encontrar una solución, pero nada se ha avanzado.

En visita reciente a los Juzgados de Granada, por parte de la Consejería se expone a la prensa que como no hay sedes adicionales, la solución pasa por construir una Ciudad de la Justicia en el extrarradio de Granada. Los mismos que no han encontrado soluciones, nos presentan por tanto esta vía como inevitable aunque sin especificar coste y plazos.

Esta alternativa no beneficia a los ciudadanos, que tendrían que desplazarse a un lugar lejano, cuando ahora pueden llegar a los juzgados caminando o en una gran red de transporte público. Tampoco beneficia por los mismos motivos a los profesionales y trabajadores de los Juzgados. Tampoco beneficia a Granada, que tendría que arbitrar nuevas líneas de transporte público, además de tener que explicar a comerciantes y asociaciones de vecinos de la zona por qué el barrio va a perder uno de los elementos que le da vida. Tampoco beneficia a los andaluces. Los proyectos de Ciudad de la Justicia en Sevilla y Jaén cuentan con presupuestos de unos 110 y 80 millones de euros, mediante colaboración público privada, lo que implica que hay que devolverlos con intereses. La falta de competencia de la Consejería para buscar un espacio adicional a Caleta no debe costar a los andaluces más de cien millones de euros. El coste de arreglar lo que hay es infinitamente menor. Por tanto este plan, ¿a quién beneficia?

La visita de hace unos días nos dejó otro anuncio, en los planes de la Junta la remodelación de los distintos espacios se prevé con un horizonte de 2033. Al parecer se quiere terminar una obra para empezar a hacer el proyecto de la siguiente, y así sucesivamente, como si no fuera posible pensar en dos cosas a la vez. Las sedes judiciales se sumarían (de hecho ya lo han hecho), a la larga lista de proyectos de plazos interminables de la provincia de Granada (autovía de la Costa, AVE, metro, presa de Rules...)

Debemos pedir a nuestros responsables políticos que hagan su trabajo según el proyecto que consensuamos en su momento, remuevan los obstáculos necesarios para obtener espacios adicionales, y sobre todo establezcan unos plazos razonables para remodelar Caleta, el Banco de España y el edificio para la Audiencia Provincial en Plaza Nueva, proyectos que ya deberían estar en marcha. Ya no caben más excusas.