Borrar

Las cepas mutantes

Puerta Real ·

Vamos a necesitar una aplicación en el móvil para recordar todos los cambios de las normas sanitarias contra el virus

Esteban de las Heras

Domingo, 17 de enero 2021, 00:05

Comenta

Todo cambia y todo muta, porque lo nuestro es mutar. Han cambiado los saludos, las miradas, los trabajos, las tertulias, las borrascas, los flirteos, el ... ocio, las clases y el aburrimiento. Muta también el virus de la Covid. El que llegó de Wuhan tiene variantes inglesa, surafricana, japonesa y brasileña. Y ya están aquí. Dicen que no son más mortales que la cepa madre, pero sí más revoltosos. Se multiplican con la fogosidad y la fuerza de adolescentes recién salidos del internado. Frente a ellos, los gobiernos del mundo solo disponen de vacunas recién nacidas y misteriosos comités de expertos que quieren vernos quietos y solos, como gazapos en madriguera, porque así ni nos contaminamos ni el bicho muta. Empieza a oler a búnker y apocalipsis. Ya lo previeron Pablo Iglesias e Irene Montero: ellos no querían abandonar Vallecas y alejarse de los vecinos del barrio; pero al convertirse en bienes patrios, se vieron obligados a mudarse a La Navata, en el municipio de Galapagar; donde solo moran los tocados por la fortuna. Mutó también a su modo el presidente Sánchez, cuando vivió en carne propia el repudio de sus barones. Y ha mutado Donald Trump que llegó a Washington como presidente de los Estados Unidos y sale de la Casa Blanca como presunto golpista. En el mundo todo muta, hasta que llega la hora de hacer mutis por el foro. Ha mutado Filomena, que apareció como un hada de blanco armiño y se ha convertido en la bruja Averías, que se suliveya cruzando bolas de nieve sucia entre el ministro Ábalos, la presidenta Díaz-Ayuso y el alcalde Martínez Almeida.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal Las cepas mutantes