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El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el rey Mohamed VI de Marruecos durante el encuentro mantenido este lunes en el Palacio Real de Rabat. EFE/Atlas

España y Marruecos comparten una «sintonía plena» en la lucha contra la inmigración irregular

Sánchez se reunió con Mohamed VI en su primera visita al país magrebí cinco meses después de llegar a la Moncloa

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Lunes, 19 de noviembre 2018, 11:17

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El rey de Marruecos, Mohamed VI, recibió este lunes en su palacio de Rabat a Pedro Sánchez como colofón de su primera visita al país magrebí. Un viaje en el que el control de la inmigración irregular fue uno de los asuntos centrales de sus conversaciones con el primer ministro, Saadedín Al Othmani. El presidente del Gobierno se comprometió ante su homólogo marroquí a mediar para que la Unión Europea dedique «de manera estructural» fondos de cooperación para frenar a la entrada de 'sin papeles' a España.

Cinco meses después de instalarse en la Moncloa, Sánchez hizo este lunes su primera visita a Marruecos, un giro respecto a la costumbre seguida por todos sus antecesores de que el país norteafricano fuera el primer destino internacional de un presidente del Gobierno de España. La mala salud de monarca alauí y problemas de agenda habían pospuesto el desplazamiento. Sánchez y Mohamed VI conversaron unos minutos el pasado 11 de noviembre en París, donde coincidieron en los actos conmemorativos del centenario del final de la Primera Guerra Mundial y acordaron el encuentro celebrado este lunes. Después de almorzar con Al Othmani, el presidente del Gobierno se desplazó al Palacio Real de Rabat y conversó durante una hora con el monarca alauí.

Pero la parte sustantiva del viaje se abordó en el encuentro con el primer ministro marroquí. Sánchez explicó en una comparecencia conjunta que ambos países tienen «una sintonía plena» para abordar el control de la inmigración irregular que llega a las costas españolas desde suelo marroquí y con las devoluciones exprés de los que saltan las vallas de Ceuta y Melilla. Unas expulsiones que se llevan a cabo al amparo de un acuerdo bilateral suscrito en 1992, y que permitió que España entregara a fines de agosto a 116 inmigrantes que habían superado el día anterior el vallado ceutí.

Hasta el 30 de octubre han llegado a España desde Marruecos 48.000 inmigrantes africanos irregulares, y el Ministerio del Interior prevé que a fin de año superen los 57.000. Las cifras previstas para este año más que duplican las de 2017, cuando llegaron 22.102 'sin papeles'. Cifras asumibles a duras penas por los servicios sociales, aunque todavía están lejos de las multitudinarias avalanchas de desplazados por la guerra en Siria e Irak que tuvieron que asumir hace un par de años Grecia e Italia y que utilizaron las rutas de Turquía y Libia.

«Responsabilidad compartida»

Sánchez se comprometió con el primer ministro a trabajar para que Bruselas asuma que tienen que «volcar recursos de manera estructural para Marruecos» porque la inmigración irregular que busca llegar a Europa a través de España no es un asunto coyuntural o la consecuencia de un efecto llamada. La Unión Europea aprobó en agosto pasado una partida anual de ayuda a Marruecos y dispuso un desembolso de 140 millones de euros, pero todavía la entrega no se ha hecho efectiva, aunque se calcula que lo será comienzos de 2019.

En este punto, Al Othmani puso énfasis en que la Unión Europea, además de ayudar económicamente a Marruecos, debería implicarse en el desarrollo de los países africanos emisores de inmigrantes para frenar los éxodos en el punto de salida. Sánchez admitió que la lucha contra la inmigración irregular es «una responsabilidad compartida» entre España, Europa y Marruecos, que tiene un componente de «seguridad» importante, pero que no es el único.

El buen momento de las relaciones bilaterales quedó de manifiesto con el acuerdo para el viaje oficial de los Reyes el próximo año, también suspendido en varias ocasiones por el estado de salud de Mohamed VI, y para celebrar en el primer semestre una Reunión de Alto Nivel entre España y Marruecos, cuya organización corresponde al Gobierno de Marruecos ya que la anterior, celebrada en 2015, tuvo lugar en Madrid. Sánchez también confirmó su presencia el 10 de diciembre en Marrakech en la cumbre de la ONU sobre migración.

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