El PP se deja querer para la moción de censura pero sin fiarse de Junts
Feijóo deja en manos de Puigdemont la decisión de romper con el Gobierno, pero le recuerda que ya ha sufrido «dos años de políticas sanchistas»
Acostumbrados a que los recurrentes órdagos de Junts contra el Gobierno se queden en nada, en el PP contemplan con escepticismo la nueva brecha surgida ... entre el partido de Carles Puigdemont y Pedro Sánchez. Pero mantienen, como han hecho en otras ocasiones, un resquicio abierto a que el grupo catalán renuncie definitivamente a dar su apoyo al Ejecutivo y se incline, esta vez sí, por la opción de romper amarras y atisbar nuevos escenarios, como la moción de censura. Así, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, conminó este jueves a Junts a «tomar sus propias decisiones» sobre la posibilidad de retirar sus votos a Sánchez, justo después de que el presidente del Gobierno pidiera a Junts tiempo para cumplir con todos los acuerdos firmados al inicio de la legislatura. Un tiempo, que, sin embargo, solo le servirá a Sánchez «para prolongar la agonía de su mandato», considera Feijóo.
«¿Qué hará Junts? Será Junts el que le pueda responder qué es lo que va a hacer. Pero nosotros tenemos muy claro que esta legislatura no tenía que haber comenzado», dijo el líder de los populares en Bruselas, donde asistió a la reunión del Partido Popular Europeo (PPE). Feijóo cree que Junts ya ha sufrido «dos años la política sanchista» y que esa experiencia le debe hacer recapacitar sobre la oportunidad de seguir sosteniendo al Ejecutivo. «Es difícil que [Sánchez] traslade tranquilidad a sus socios y que haya algún español tranquilo con este Gobierno», señaló.
Los populares tratan de cercar el Ejecutivo tras la nueva vuelta de tuerca de los independentistas, que presionan a Sánchez para que saque adelante los compromisos pactados para esta legislatura con un aviso de que puede empezar «la hora del cambio».
Sánchez «está pidiendo tiempo para prolongar la agonía de su mandato, la agonía de su Gobierno y la agonía de la situación política española» porque desde que perdió las elecciones de julio de 2023 «no ha tenido más objetivo que ser presidente del Gobierno a cualquier precio», argumentó Feijóo.
En cualquier caso, en el PP son conscientes de las dificultades para articular una moción de censura contra Pedro Sánchez. Primero, porque la moción debería concitar el acuerdo de dos partidos en principio incompatibles como Vox y Junts, teniendo en cuenta además la guerra que mantiene el partido de Santiago Abascal contra los populares. Y segundo, porque cualquier acuerdo con Puigdemont requeriría de Feijóo cesiones difíciles de explicar al electorado de la derecha. Él mismo recordó en Bruselas que Sánchez, para mantenerse en el poder, está pagando «precios muy altos relacionados con la soberanía de España, el Código Penal y la igualdad ante la Ley»; precios que los independentistas catalanes no bajarían en una hipotética negociación con Junts.
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