Cupra da un paso adelante con Tavascan, un «eléctrico emocional»

Ni uno ni otro andan desencaminados ante lo que es también una apuesta comercial clave para el futuro de Cupra, uniéndose el Tavascan, en el mercado en 2024 y farbricado en China, a la gama Cupra como su segundo 100% eléctrico tras el Born, y como complemento a las versiones híbridas enchufables del Cupra León y el Cupra Formentor. En 2025 llegarán el Terramar y el futuro modelo eléctrico de pequeño tamaño basado en el concept UrbanRebel. La electrificación de Cupra no tiene marcha atrás.

Basado en la plataforma HEB para coches eléctricos del Grupo Volkswagen, el Cupra Tavascan se ofrecerá con tres niveles de potencia. En la cúspide de la gama se sitúa la versión VZ de 250 kW (340 CV) que, gracias a sus dos motores instalados uno en cada eje, ofrecerá tracción total para aportar la mejor experiencia de conducción. Los primeros escalones de la gama los ocupan la versión de tracción trasera, que entrega 210 kW (286 CV) gracias a un motor situado en el eje posterior. El rendimiento del Tavascan se combina con una batería que ofrece suficiente almacenamiento de energía para recorrer alrededor de 550 kilómetros con una sola carga, explica la compañía.

«El nuevo SUV coupé totalmente eléctrico mantiene el deseo de la marca de ofrecer un automóvil capaz de reinterpretar las altas prestaciones de forma disruptiva y muy expresiva», se señala desde Cupra, que añade que «las distintas configuraciones de chasis seleccionables a través del sistema DCC Sport, la dirección progresiva y los neumáticos de altas prestaciones montados en llantas de aleación de 53 cm (21 pulgadas), conectan al conductor con el vehículo y la carretera para proporcionar una experiencia única al volante».

Las dimensiones del coche -4.644 mm de largo, 1.861mm de ancho y 1.597 mm de alto, y una distancia entre ejes de 2.766 mm- responden al »equilibrio entre la deportividad y la practicidad necesaria para el día a día».

En cuanto a diseño exterior, y como confirma Alberto Torrecilla, uno de sus rasgos distintivos es su frontal, con un punto «intimidante, misterioso», todo integrado en un conjunto que enfatiza su deportividad y perfil aerodinámico, elemento clave este último en los coches eléctricos. Del conjunto, sobresale la nueva firma lumínica de tres triángulos de los faros delanteros, en un sistema, por otra parte, «totalmente automático que permite conducir con las luces largas encendidas y evita deslumbrar a otros vehículos». También como rasgo destacado, en lo que es casi una declaración de intenciones, el diseño se ve realzado por el logotipo Cupra iluminado, «que preside con orgullo el capo con sus profundas superficies esculturales». El Tavascan es uno de los primeros modelos europeos de producción en serie en iluminar su logotipo.

En el interior, lo primero que llama la atención es la espina dorsal, una pieza casi escultórica que une la cónsola central con el salpicadero en torno a la cual gira el diseño poco convencional del habitáculo y sobre la que se construye todo el interior.

Junto al diseño exterior e interior, el Cupra Tavascan incorpora un sistema de info-entretenimiento con pantalla de 38 cm (15 pulgadas), la más grande montada hasta la fecha en un Cupra, así como un sistema de audio de alta fidelidad de doce altavoces, desarrollado e colaboración con la firma de sonido premium 'Sennheiser'.

En el apartado de seguridad y confort se incorporan la nueva versión del asistente de viaje conectado (Connected Travel Assist), que mejora su funcionamiento a traves de los datos recibidos de la Nube, especialmente en carreteras mal señalizadas. También está disponible el asistente de cambio de carril autónomo, que da un paso adelante en términos de confort cuando se circula por autopista. El Cupra Tavascan ofrece, además, funciones avanzadas de aparcamiento autónomo, entre las que se incluyen el Intelligent Park Assist con función memoria, asistente de aparcamiento memorizado; y el Remote Park Assist (RPA), asistente de aparcamiento en remoto desde la App.