Siete días de acampada por Palestina
Más de cien estudiantes exigen a la UGR que rompa relaciones académicas con Israel instalados en los paseíllos universitarios
Susana Besteiro Fornet
Miércoles, 15 de mayo 2024, 00:08
Casi un centenar de carpas sorprende a algunos de los que caminan por los paseíllos universitarios del campus de Fuentenueva, pero la mayoría de la ... comunidad de la UGR ya está enterada de la acampada que hace una semana llevan a cabo alumnos de todas las facultades de la universidad. La razón se hace evidente al ver la decena de banderas de Palestina dispersas por todo el lugar.
El día en el campamento, al inicio improvisado y ahora muy bien organizado, comienza a las 8:30 de la mañana con una concentración de los más de cien estudiantes que participan en el movimiento. Seguidamente, aquellos que continúan en clase se dirigen a sus respectivas facultades y los que no salen a hacer «pasaclases», donde dan información a otros estudiantes, o se quedan para apoyar las actividades del día. Mesas y sillas plegables sirven de zona de estudio para aquellos que deben continuar con sus actividades académicas. No se trata de una huelga, por lo que ningún estudiante ha dejado de asistir a clase o trabajar, aquellos que lo hacen.
A diferencia de otros colectivos universitarios que en estos momento desarrollan iniciativas similares a esta acampada en apoyo a la causa palestina, los estudiantes de la UGR tienen a su favor el tamaño de la ciudad, el cual les permite ir a casa, ducharse y cambiarse de ropa a diario, además, el campus ha habilitado las duchas de su polideportivo para que las puedan utilizar.
A dormir
La cantidad de jóvenes en el campamento varía según el horario, muchos se quedan a dormir en el sitio, otros van solo durante el día, y otros muchos acuden a las charlas a pesar de no participar oficialmente en la acampada. Para que el campamento funcione de forma eficiente, los estudiantes han dividido sus tareas por comisiones, entre las cuales se incluyen las de Logística, Tesorería, Portavocía, , Redes Sociales, Actividades y Formación y Análisis Politológico.
Estos últimos son los encargados de preparar las charlas sobre la historia palestina, el origen y evolución del conflicto o la colonización sionista de ese territorio. Sobre el apoyo externo que ha recibido la acampada comentan a Ideal: «Funcionamos de forma independiente. Con nosotros colaboran algunos colectivos sociales desde un perfil bajo, pues no se trata de destacar sino de actuar de forma unitaria. Desde la asamblea hacemos hincapié en mantener nuestra independencia; el mayor apoyo lo recibimos de individuos que vienen a título personal. Reafirmamos que no estamos vinculados a ningún partido político».
Cada día se realiza desde las 7:30 de la tarde una asamblea que reúne a todos los miembros del campamento, que funciona totalmente horizontal y donde todos los presentes pueden intervenir libremente. Estas asambleas comienzan siempre con la intervención de alguna de las cerca de 30 personas palestinas, o de ascendencia palestina, que participan actualmente en la acampada. Ellos son los encargados de recordar que las protestas no son por una razón política, sino por las miles de personas reales que perecen cada día en este conflicto.
La causa
Los participantes de la acampada exigen a la UGR la ruptura de todas sus relaciones con el Estado de Israel. Adrían, estudiante del máster de Profesorado, y Mikel, estudiante de Arqueología, miembros de la comisión de Formación y Análisis explican sobre el origen de dichas relaciones: «Tiene que ver con el funcionamiento de las universidades públicas y su inserción dentro de las lógicas del capitalismo. Al final, la universidad funciona como una empresa más y tiene su propio capital que exportar. En ese sentido le da igual con quien tienen un convenio de colaboración, de investigación o hasta de desarrollo armamentístico».
«No podemos dejar de ver la hipocresía de la institución universitaria en comparación con el momento en que se dió la invasión rusa en Ucrania; ahí hubo un posicionamiento firme y explícito de la UGR, que rompió relaciones con Rusia. No podemos dejar de ver el doble rasero que se emplea en la cuestión israelí-palestina, por ser Israel un claro aliado de las potencias occidentales. Creemos que, si se adoptaron estas medidas con el Estado ruso, lo coherente es hacer lo mismo con Israel, responde Adrián sobre las demandas que presentan ante la dirección de la UGR, asegurando que hasta su cumplimiento las protestas continuarán.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión