Regina Revilla o la creatividad innovadora
La Universidad de Granada reconoce hoy con un doctorado honoris causa el mérito de la doctora Revilla, forjado a lo largo de cinco décadas de intensa y apasionada dedicación profesional
César Nombela
Jueves, 13 de mayo 2021, 01:01
Un relato biográfico, por breve que sea, puede ir más allá de la enumeración fría de logros y desempeños que recoge un curriculum vitae. Se ... trata de proyectar la tarea de una persona en el contexto en el que ha desarrollado su itinerario vital, reflejando la huella de su actividad. Hoy, la Universidad de Granada reconoce con un doctorado honoris causa el mérito de la doctora Regina Revilla, forjado a lo largo de cinco décadas de intensa y apasionada dedicación profesional. Mi entrañable amistad con la destinataria de tan prestigiosa distinción académica no impedirá que comente con objetividad el alcance de sus logros y el impacto de su desempeño.
La biografía de Regina se enmarca en el campo del medicamento en su entorno sanitario e industrial, todo ello en el sentido más amplio. Tras licenciarse en Farmacia y especializarse en Tecnología Farmacéutica inició un recorrido, creativo y fecundo, que habría de llevarla en diversas etapas a través de la empresa privada, la gestión pública y la colaboración público-privada. Su versatilidad para adoptar iniciativas y cooperar con cuantos tienen algo que emprender, su capacidad para superar escollos y circunstancias negativas que surgieron en tan dilatado período de tiempo, su tesón, en fin, para persistir en la búsqueda de unos objetivos, pueden explicar los logros que definen su trayectoria biográfica. Todo ello coincidiendo oportunamente con momentos clave para la promoción de la innovación y la tecnología en España.
Las responsabilidades desempeñadas por Regina Revilla en la Administración pública se proyectaron desde el ente público industrial CDETI hasta las direcciones generales de Farmacia y Productos Sanitarios o de Política Tecnológica, en los ministerios de Sanidad y de Industria, para culminar en la Secretaría General de Alimentación, del departamento ministerial de Agricultura.
Todo ello en las décadas de los ochenta y noventa, cuando España hubo de poner los fundamentos de la expansión del sistema de Ciencia, Tecnología e Innovación. Son años clave para el diseño en España de programas de Biotecnología capaces de proyectarse en la Salud y el desarrollo industrial. Y todo ello con los marcos regulatorios que demanda el sector Salud, tanto para el entorno nacional como el de la UE.
Terminada su etapa en puestos de gestión pública, la Dra. Revilla encontró un nuevo territorio para desarrollar su creatividad en el sector privado industrial con fuerte componente innovador. Desde la empresa MSD supo también plantear iniciativas con impacto para nuestro país, muchas veces basadas en la colaboración con universidades y centros de investigación públicos. Entre ellas, la puesta en marcha de cátedras y foros de innovación en nuevas tecnologías sanitarias, en promoción del crecimiento y la sostenibilidad o en políticas públicas con repercusión sanitaria.
En Granada, la Fundación Medina, un centro de excelencia para la investigación en medicamentos innovadores, representa otro ejemplo del empeño de Regina en la búsqueda de oportunidades para la innovación, que tanto necesitamos en España. Su etapa de presidenta de ASEBIO le llevó a representar a todo este sector industrial de fuerte crecimiento en nuestro país.
La larga lista de reconocimientos recibidos por Regina Revilla culmina hoy con uno de los que seguro apreciará más, el doctorado honorario por la muchas veces centenaria Universidad de Granada. Y todo ello a propuesta de su Facultad de Farmacia, un centro con liderazgo acreditado en España en la formación de farmacéuticos y en la investigación sanitaria. Muchos nos unimos al alma mater granadina satisfechos por tan adecuada iniciativa.
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