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Los once jóvenes talentos de sobresaliente de la UGR
El Consejo Social entrega sus premios a la iniciación a la investigación a universitarios que centran sus investigaciones en cuestiones que mejoran la vida de las personas
Todos tienen en común expedientes académicos brillantes. Eso es lo tangible. Lo que se ve negro sobre blanco. Están entre los mejores de sus promociones. ... Acumulan matrículas de honor y sobresalientes. También comparten aquello que como se decía en El Principito: «Lo esencial es invisible a los ojos». Lo recordó uno de los galardonados, Juan Manuel Milla Mercado, en la entrega de los IV Premios de Reconocimiento al Talento del Estudiantado para Iniciación a la Investigación del Consejo Social de la Universidad de Granada (UGR). Son jóvenes comprometidos, reivindicativos y constantes en sus estudios. Con otros valores de ese esencial que es invisible a los ojos.
Los once universitarios galardonados, había doce reconocidos, pero acudieron once al acto celebrado en el Espacio V Centenario, son promesas de la investigación. Lo son en campos muy diversos. Sus tesis doctorales las han centrado en la Historia del Arte; ejercicio físico en personas con cáncer de colon; la esclerosis múltiple o las encuestas. Son solo algunos ejemplos de esos doce jóvenes con un talento inconmensurable, que lo han puesto al servicio de la sociedad en sus investigaciones, algunas en sus primeros compases.
Ejercicio físico en enfermos de cáncer, alcoholismo en embarazadas o consecuencias psicosociales de la pobreza, son algunas de las cuestiones que están investigando
La primera en recoger su diploma fue Belén Habbob Martos, que comenzó justificando su afonía porque se ha dejado la voz explicando a sus estudiantes qué es la justicia social y en los foros y acampada por Palestina. Fue un discurso muy emotivo porque recordó a su familia que sufre los bombardeos de Israel ahora así como los que murieron a mediados del siglo pasado. Se emocionó, hasta las lágrimas, cuando agradeció a su madre su apoyo, se acordó de su padre y de sus abuelos, en el cielo. Defendió una Palestina libre en su alocución y vestimenta. Y, abogó porque la academia no se puede entender sin el activismo social. Al final sacó la bandera palestina. No sin antes decir que se sentía orgullosa de pertenecer a la UGR y de que esta institución haya paralizado las relaciones académicas con Israel.
En las áreas de Artes, Humanidades y Ciencias Sociales y Jurídicas fueron premiados también Juan Manuel Milla, que defendió la importancia de las Humanidades. Terminó la carrera de Historia del Arte con una media de 9,7, veinticuatro matrículas de honor, quince sobresalientes y un solo notable. «No me equivoqué al elegir carrera», confirmaba tras admitir que le gustaría dedicarse a la docencia y la investigación. Alejandra Trillo Peña fue otra de las galardonadas, está haciendo su tesis en el departamento de Psicología Social.
Manuel Fernández Escabias, María Herrada Robles y Antonio Clavero Jimeno dejaron muy alto el pabellón en estos galardones. Todos han estudiado Ciencias de la Actividad Física y del Deporte y presumieron de su sentido de pertenencia a este centro de la carretera de Alfacar. Todos están vinculados al grupo de investigación Profith. Defendieron la actividad física para ser personas «más sanas». Y, María dejó dicho que a veces la vida no parece ser la fiesta que esperamos, pero «mientras estés aquí, baila». En los discursos todos se acordaron de sus familiares y algunos de sus paisanos, como fue el caso de Antoni Clavero, que mencionó a sus vecinos de Vilches (Jaén) que son «muy buenas personas».
Belén Habbob Martos, una de las universitarias premiadas, reivindicó una Palestina libre y dijo sentirse orgullosa de pertenecer a la UGR tras romper relaciones con Israel.
En las ramas de Ciencias, Ciencias de la Salud, Ingenierías y Arquitectura los galardonados fueron Jorge Luis Rueda Sánchez, Alba Navas Otero, Patricia Fernández Galindo, Carlos García Díaz y Teresa Aparicio Mescua. Los once estuvieron en el acto. Alba María Oviedo Castillejo Gutiérrez no pudo asistir. Teresa y Carlos han estudiado, los dos, Psicología. Tienen de media más de un nueve. Carlos investiga sobre las consecuencias psicosociales de la pobreza y Teresa, sobre el alcohol en las embarazadas.
Jorge Luis recordó que se matriculó en el grado en Biotecnología, que exigía mucha nota, y se cambió tras el primer año a Estadística, una carrera en la que entonces se entraba con un cinco. Hoy, por ayer, diez de junio de 2024, se alegra infinitamente. Está haciendo y hará en los próximos años, lo que le gusta: investigar y la docencia. Patricia, tiene un 9,27 en su expediente de grado de Química. Está haciendo el doctorado en la UGR y volvería a repetir sus estudios y elegir Granada.
El rector de la UGR, Pedro Mercado, presidió el acto, acompañado de la presidenta del Consejo Social de la institución universitaria granadina, Teresa Pagés. Mercado destacó que la iniciación a la investigación es la semilla que después hace buenos investigadores y carreras muy prometedoras. Pagés subrayó que para el Consejo Social es un honor «tener estos jóvenes con tanta dedicación y tanto esfuerzo para tener estos expedientes». Son el futuro de la Universidad y de la sociedad.
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