La contratación de empresas con la UGR aumenta un 80% y supera los 9,4 millones

La crisis económica de los últimos años ha tenido un impacto más que notable en la inversión privada en I+D que ha descendido desde el 1,39% (sobre PIB) en 2008 a 1,2% en 2017. Esta disminución ha dejado, también, su impacto en el descenso en la definición y puesta en marcha de los proyectos y contratos con el sector público que ha sido constante y generalizada en todo el sistema nacional de innovación desde 2008. Sin embargo, en 2018 en la Universidad granadina se ha invertido la tendencia de forma muy significativa: se ha incrementado el número de contratos y proyectos (un 11% más que en el año anterior), ha aumentado sustancialmente el volumen contratado (casi un 80% sobre 2017), lo que supone un crecimiento importante del presupuesto medio por contrato (60% respecto a 2017), según los datos aportados por Jesús Banqueri, director de la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la Universidad granadina.

El importe medio por contrato ha pasado de 16.000 euros en 2017 a 25.700 euros en 2018, lo que supone una escalada del 60%. Atendiendo a la distribución por áreas científico-tecnológicas, se puede apreciar un incremento importante en la mayor parte de las áreas, siendo especialmente destacable en el área de agroalimentación, biosanitaria, ciencias de la vida, física, química y matemáticas y tecnologías de la información y comunicaciones.

Los contratos y proyectos de mayor volumen medio corresponden a las áreas de ciencias de la vida, ciencias y tecnologías de la salud y las TICs, mientras que los de menor importe se circunscriben a las áreas humanidades así como ciencias sociales, económicas y jurídicas ya que éstas requieren de menos materiales (fungible e inventariable) para la realización de los proyectos. El importe de los contratos en ciencias y tecnologías de la salud fue de 2,4 millones de euros y en TIC de 1,5 millones de euros. Son los más destacados.

En cuanto a la distribución por ámbito geográfico de la empresa contratante se ha experimentado un incremento muy notable del importe contratado con empresas de ámbito provincial (85%), regional (241%) y europeo (82%).

El mayor volumen de contratos se registra en empresas granadinas, un total de 167 acuerdos mientras que en 2017 fueron 117, la subida ha sido del 43%. En el ámbito nacional se rubricaron 117, en este caso se han perdido tres porque el año anterior fueron 114; en el autonómico fueron 61 el año pasado y el anterior 71, por lo que se baja; en el europeo se pasa de 17 en 2017 a 14 en 2018; y en el internacional, de nueve a once, por lo que se incrementa en dos.

En este extremo, Jesús Banqueri alude al trabajo que se ha realizado desde la OTRI visitando empresas. Algunas de las acciones se han hecho bajo el paraguas del programa para conectar anualmente la UGR con, al menos, 35 empresas de la provincia, que aún no hayan trabajado con la Universidad en actividades de I+D+i. El programa incluye visita a instalaciones, diagnóstico y análisis de oportunidades, interacción con los investigadores seleccionados, presentación de soluciones científicas y tecnológicas y búsqueda de vías de financiación para las colaboraciones resultantes. Los trabajadores de la Universidad granadina explican el amplio abanico de actividades tecnológicas y científicas que desarrollan y que pueden aplicarse en las empresas. Los investigadores pueden aportar soluciones a los problemas que se presentan en las empresas así como mejora en decenas de sistemas.

En 2018, el número de contratos y proyectos ha superado los 360, como se ha indicado; se ha incrementado de 331 a 367, lo que supone un incremento del 11%. Esta cifra de contratos no se alcanzaba desde 2008. El comportamiento ascendente más notable ha sido el registrado en las áreas de agroalimentación que pasa de 9 a 16; ciencias sociales, económicas y jurídicas, que aumenta de 46 a 59; y en Ciencias de la Vida, que se incrementa de 1 a 12 contratos y proyectos.

Asimismo, experimentó un leve aumento (menos del 10%) el campo de recursos naturales y medio ambiente y en tecnologías de la información y comunicaciones. Hay una ligera disminución en torno al 10% en ciencias y tecnologías de la salud y en física, química y matemáticas. Se mantiene sin variaciones importantes la actividad en las áreas biosanitaria, Humanidades, y tecnologías especiales de la producción.

La OTRI ha diseñado nuevos programas en el Plan Propio de Investigación y Transferencia orientados a mejorar la definición y competitividad de proyectos en colaboración con empresas. Asimismo, han creado una red de promotores tecnológicos para incrementar la «capilaridad» de las acciones de transferencia.