Sarkozy declara por el pago de Libia a su campaña

Sarkozy, de 65 años, fue interrogado por los jueces franceses después de que el Tribunal de Apelación de París rechazara a finales de septiembre los recursos que habían presentado sus abogados para tratar de anular esa investigación judicial.

La pesquisa comenzó hace ocho años cuando 'Mediapart' publicó en 2012 un documento oficial libio que supuestamente probaría que el régimen de dictador Muamar Gadafi financió la campaña presidencial de Sarkozy de 2007. El exmandatario galo niega las acusaciones.

El hombre que dirigió Francia entre 2007 y 2012 fue imputado formalmente por este caso en marzo de 2018. A Sarkozy se le investiga por corrupción pasiva, malversación de fondos públicos y financiación ilegal de una campaña electoral.

En 2016, el empresario franco libanés Ziad Takieddine aseguró haber actuado de intermediario y haber entregado entre finales de 2006 y principios de 2007 cinco millones de euros a Sarkozy, que por aquel entonces era ministro de Interior, y a Claude Guéant, su director de gabinete. El expresidente niega haber recibido dinero de Takieddine.

Este no es el único problema que tiene Sarkozy con la Justicia francesa. A finales de noviembre, se sentará en el banquillo de los acusados por supuesta corrupción y tráfico de influencias en el llamado «caso de las escuchas telefónicas». Y en marzo será juzgado por presunta financiación ilegal de su campaña presidencial de 2012, un asunto conocido en Francia como el 'caso Bygmalion'. El socialista François Hollande le derrotó en esos comicios.

Sarkozy publicó este verano en Francia su segundo volumen de memorias titulado 'Tiempo de tormentas' (editorial L'Observatoire), que se convirtió en un superventas. En ese libro, el exmandatario cuenta sus dos primeros años en el Palacio del Elíseo.