La Policía alemana abate a un hombre armado cerca del Consulado de Israel en Múnich

Al parecer el sospechoso apareció en el lugar con un arma larga y disparó contra una cabina de vigilancia policial ante el Centro de Documentación del Nacionalsocialismo. Los agentes, de los que un total de cinco protegía el edificio en el exterior, respondieron con disparos y abatieron al atacante, que resultó muerto prácticamente en el acto.

«Fuerzas policiales observaron a una persona que parecía ir armada. Los agentes hicieron uso de sus armas, abatieron e hirieron a esa persona», señaló la Policía muniquesa en un primer informe a través de la plataforma X. La identidad del atacante se desconoce por el momento y los responsables de la investigación tratan de averiguarla con urgencia, así como los motivos de lo que podría ser un atentado frustrado.

La zona fue inmediatamente acordonada por un amplio dispositivo policial, a la vez que llegaban agentes especiales de intervención inmediata y un helicóptero sobrevolaba la zona. La Policía subrayó que el atacante actuó al parecer solo y que no hay indicios de que tuviera algún cómplice.

El ministro de Interior de Baviera, Joachim Hermann, informó de que el sospechoso realizó varios disparos sin alcanzar a nadie antes de que los agentes presentes respondieran con sus armas. El atacante murió por las graves heridas sufridas, destacó Hermann.

«Se trata de un incidente grave», subrayó la ministra federal de Interior, Nancy Faeser, quien rechazó hacer especulaciones a la espera de los resultados de la investigación y se remitió a la declaraciones de su colega bávaro y la Policía.

El incidente coincide con el aniversario del atentado de 1972 contra los Juegos Olímpico de Múnich. Entonces terroristas palestinos asesinaron a once atletas israelíes. Aquel 5 de septiembre dos miembros de la delegación hebrea fueron asesinados en la villa olímpica, mientras otros nueve eran tomados como rehenes. Unas dieciocho horas después, un intento de liberación por parte de la Policía alemana acabó en tragedia y la muerte de todos los rehenes, un agente y cinco terroristas palestinos.

El comando palestino exigía la liberación de 200 presos en Israel, así como la de los fundadores de la organización terrorista alemana Fracción del Ejército Rojo, Andreas Baader y Ulrike Meinhof. Con motivo de ese aniversario el Consulado General de Israel en la capital bávara se encontraba prácticamente vacío este jueves en el momento del ataque, ya que su personal había acudido a un acto conmemorativo en memoria de las víctimas.

«Nuestra oficina, que se encuentra junto al Centro de Documentación del Nacionalsocialismo en el centro de Múnich se encuentra rodeada de policías. Nuestros empleados están seguros. Exactamente a las 9.10 de la mañana se oyeron fuertes detonaciones. Por lo menos una docena de disparos. No sabemos más. Actualmente un gran despliegue policial ha tomado la calle», señalaba en declaraciones al tabloide 'Bild' el vicepresidente de la Conferencia de Seguridad de Múnich, Benedijkt Franke.