Moscú ordena evacuar Nova Kajovka ante el avance ucraniano

De ese modo, según recoge la agencia de noticias TASS, la urbe y sus alrededores pasan ahora a convertirse en zonas fortificadas para resistir el avance ucraniano. Filipchuk aseguró que esta llegada se produciría siempre y cuando las tropas de Volodímir Zelenski consigan cruzar un puente muy deteriorado por los combates.

El viaducto de Nova Kajovka era hasta hace un par de días uno de los dos que quedaban en pie a través del Dniéper –el otro es el de Antonivski–, pero los continuos ataques lo han deteriorado. Además, según imágenes de satélite de la compañía Maxar y vídeos que han llegado a manos de los ucranianos de Jersón, tras su retirada de la región, Moscú ha volatilizado lo que quedaba del puente para evitar el avance ucraniano. Maxar explicó en un comunicado que las secciones de la extensión norte de la presa y las compuertas habían sido «destruidas deliberadamente».

Mientras, las autoridades prorrusas de Jersón declararon hoy la ciudad de Gueníchesk como la nueva «capital administrativa temporal» de la región. A las orillas del mar de Azov y aproximadamente a unos veinte kilómetros al norte de la frontera de la península de Crimea, esta urbe se encuentra en el extremo oriental del territorio anexionado por Moscú con un referéndum que Occidente tacha de «falso».

«Actualmente, la capital administrativa temporal de la provincia de Jersón es Gueníchesk. Todas las principales autoridades se concentran allí», confirmó el representante de la administración prorrusa de Jersón, Alexander Fomin, a la agencia rusa TASS. Este municipio, un importante puerto marítimo y centro turístico de la zona, pasó a estar bajo control del Kremlin el pasado 27 de febrero, tres días después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenara la invasión de Ucrania.

Por otra parte, el temor por un posible riesgo nuclear volvió a aflorar después de la misión del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) al Instituto de Tecnología de Járkov (KIPT) que tuvo lugar del 8 al 10 de este mes. La agencia de Naciones Unidas publicó hoy las conclusiones del estudio en las que confirmó graves daños materiales por bombardeos en las instalaciones de investigación atómica. No obstante, no encontraron indicios de fugas radiactivas o desaparición de material nuclear declarado.

«La extensión del daño es dramática e impactante, incluso peor de lo esperado», advirtió el director general del OIEA, Rafael Grossi, quien subrayó que «casi todos los edificios del sitio han sido afectados, muchos de ellos probablemente irreparables».