Bernard Sanders desafía a Hillary Clinton

"Estamos aquí para ganar", ha manifestado el senador, uno de los pocos legisladores estadounidenses que se define como socialista y que de llegar a la Casa Blanca sería el presidente de mayor edad en la historia del país.

Sanders, de 73 años, había declarado previamente al diario 'USA Today' y a la agencia Associated Press su intención de postularse para la nominación del Partido Demócrata para las elecciones de noviembre de 2016. Los estadounidenses "quieren un cambio fundamental del Estado para servir a los estadounidenses comunes y corrientes, no sólo a los multimillonarios", señaló Sanders.

Prácticamente desconocido a nivel nacional, Sanders, sin embargo, es un rostro habitual en los medios de comunicación estadounidenses, y representa al sector más izquierdista de los electores.

Sanders sabe que su falta de popularidad, en comparación con la de la exsecretaria de Estado, es el primer reto de su campaña. "La mayoría de la gente en Estados Unidos nunca ha oído hablar de Bernie Sanders. Más del 90% de los estadounidenses saben de Hillary Clinton", ha apuntado a 'USA Today'.

25 años de carrera en Washington

Si bien su candidatura no representa una amenaza seria para Clinton -que cuenta con el apoyo del 62% de los demócratas de cara a las primarias- podría forzarla a clarificar sus posiciones sobre temas candentes como los acuerdos de libre comercio en negociación, a los que se oponen los sectores de la izquierda y los sindicatos.

"La gente no debería subestimarme", ha señalado Sanders, quien ha expresado su convicción de ser capaz de "recaudar cantidades significativas (de fondos de campaña) a través de pequeñas contribuciones individuales".

Sanders llegó a la Cámara de Representantes en 1990 como independiente. En 2006 fue elegido para el Senado y logró la reelección en 2012.