Cifuentes impide un merecido empate del Granada

La lista de José Luis Oltra incluyó solo una novedad. Ante la baja por lesión de Darwin Machís, el valenciano ha preferido incluir a otro mediocentro defensivo, Raúl Baena, ante que a uno de los extremos disponibles, como Antonio Puertas o Licá. El mensaje es desalentador para el almeriense y conclusivo para el portugués, a quien se le ha emplazado a abandonar el equipo. No así a Puertas, que en estas semanas intentará torcer la opinión actual de su entrenador. En la entidad no le quieren dar salida pero un ostracismo reiterado podría cambiar los planes.

Salvo retoque extraño, lo normal es que Oltra apueste por el equipo que compitió ante el Sporting de Gijón desde el minuto 15, tras la dolencia de Machís. Un Granada con Javier Espinosa escorado a la izquierda, con lo que se pierde algo de velocidad pero contribuye a la mejoría del juego interior. La coincidencia con Kunde, Montoro y Sergio Peña como enganche promueve un fútbol de asociación, que complementa Pedro. Alternativa evidente al estilo de contragolpe del que hace gala el Cádiz. Los amarillos presentan un sistema defensivo muy difícil de franquear -son el equipo menos goleado, con 12 dianas-, a pesar de que tendrá bajas importantes atrás; y un ataque fugaz, con dos rápidos cuchillos por las bandas, Álvaro García por la izquierda y Salvi Sánchez por la derecha.

Los rojiblancos tendrán que superar la nostalgia de su avión venezolano, apelando a un mayor y mejor dominio del balón, a la espera de que Joselu sepa interpretar la sinfonía y contribuya a materializar el peligro que creen los nazaríes.

El Ramón de Carranza reflejará una atmósfera inmejorable, con los cánticos de la hinchada local, en sana rivalidad con la granadina, que se desplazará por cientos hasta la 'tacita de plata'. Ambiente de Primera para un clásico regional de altura.

El episodio Adrián Ramos quedó resuelto con el ingreso del colombiano en la lista de desplazados. Pese a sus dos días de retraso en el regreso de Colombia por problemas con las conexiones aéreas, por los que se ausentó de tres sesiones, la entidad solo le ha sancionado económicamente pero no se ha tomado ninguna medida deportiva más en su contra. El ariete habló con Oltra, sus argumentos le convencieron y el técnico le ha visto enchufado estos días como para valorarlo como opción en Cádiz, en principio partiendo del banquillo.

Son días de expectación e incertidumbre por la apertura del mercado de fichajes, aunque el Granada de momento se lo toma con calma, pues sus aspiraciones son pocas pero exquisitas. Buscan un extremo diferencial y para ello tiene que esperar a que se despeje un poco el panorama en Primera división. Cuando pesquen los de arriba, llegará el turno de los 'gallitos' de abajo.

Hernán Menosse es la otra baja médica aparte de Machís, aunque el uruguayo participa poco como titular desde la llegada de Chico Flores. El gaditano vuelve a la que fue su casa con afán de reivindicarse. Guardando turno estará Germán Sánchez, que no podrá cruzarse en el césped con su hermano Servando, en el Cádiz, al ser baja por lesión. Le ocurre igual a Sankaré y Mauro.

A quien más echa de menos el conjunto de Álvaro Cervera es a José Mari, líder espiritual de su vestuario y del centro del campo. Garrido, Abdullah y Álex Fernández tratarán de apañarse para contener la línea de mayor potencial de los visitantes. También están en la enfermería el medio Alberto Perea y el punta José Ángel Carrillo, por lo que Rubén Cruz, futbolista en la rampa de salida, ha completado el grupo.

Cervera tendrá que decidir si alinea a Romera en el ariete o si cede el testigo a Barral, que jugó en Copa. Contribuiría al morbo de una cita que mide a dos claros aspirantes al ascenso.