Resumen del 2018: Mayo

Un equipo desafinado

Dijo el técnico burgalés Miguel Ángel Portugal que en su primer partido al frente del Granada le había tocado bailar 'con la más fea' por tener que verse las caras en Los Cármenes con el Rayo Vallecano, uno de los equipos más en forma de la categoría, que se guardó medio ascenso a Primera en la cartera tras vencer en Granada en una gélida noche primaveral (0-2).

Después de la dolorosa derrota ante el equipo de Vallecas, que dejaba al Granada en el décimo lugar de la tabla clasificatoria, los rojiblancos tuvieron una última oportunidad de engancharse al campeonato si vencían a un rival de la zona media-baja como el Almería. Sin embargo, el Granada volvió a desafinar, cayó con claridad en un estrepitoso partido colectivo (2-0) y, pese a ser un equipo diseñado para ascender, acumuló unos números horrendos: un gol marcado y seis encajados en últimos partidos de Liga.

Pitada ante el Reus

Las malas actuaciones del Granada en los anteriores partidos generaron una corriente de indignación y enfado en el seno de su parroquia. Muchos aficionados optaron por no ir al Granada-Reus para que se notara su enfado (fue, de largo, el partido con la peor entrada de la temporada 2017/18) y los que fueron recibieron al equipo rojiblanco con pitos, que se extendieron durante algunas fases del partido.

El espectáculo entre dos equipos que prácticamente no tenían nada en juego fue soporífero y tan solo un gol de falta de Álex Martínez en el minuto 16 (el 1-0 definitivo) pudo alegrar el rostro de aquellos aficionados que acudieron a presenciar el choque o dedicaron dos horas de su vida a verlo por televisión.

Adiós definitivo al ascenso

La penúltima jornada de Liga deparó un Sporting-Granada en el que el conjunto andaluz tan solo contaba con un 16% de opciones de seguir vivo en su lucha por disputar la fase de ascenso. El equipo de Miguel Ángel Portugal necesitaba ganar y que casi todos sus rivales pincharan, algo que no sucedió.

Bien es cierto que hubo resultados sorprendentes, pero la derrota de los granadinos en el estadio El Molinón-Enrique Castro 'Quini' (2-1) terminó por certificar lo que era un secreto a voces: que el Granada ya no tenía ninguna opción real de ascender de categoría. En mayo también concluyó el campeonato de Segunda B y el Granada B lo concluyó en una meritoria octava posición.