La revolución de Matteo sigue su curso
La plazoleta ·
Es evidente que el italiano se había preparado para el mercado, pero queda lo obvio: el rendimiento de una plantilla tan remozada
Es probable que Matteo Tognozzi y Alexander Medina tengan una sensibilidad futbolística común, pero tienen un paralelismo más, aparte de ser director deportivo y entrenador ... del mismo club. Ambos son amigos de dos grandes centrales, ambos retirados, sin la consideración de otros futbolistas, pero con un despliegue magnífico cuando estaban en activo y una carrera encomiable. Tognozzi es íntimo de Giorgio Chiellini y Medina de Diego Godín, defensas de sus países, apasionados, con liderazgo, pero sin tanto ruido mediático. Tipos firmes y discretos, que trabajaban duro. Quizás, ejemplos de vida para los dos ejecutivos rojiblancos.
Matteo se ha dispuesto a cumplir su plan para la salvación del equipo que dirige el 'Cacique'. Es evidente que el italiano se había preparado bien de cara al mercado invernal, como delatan las operaciones concretadas y las que están en camino. Han tenido que ser semanas intensas que ahora concentran su resolución. Desde su llegada, ha procurado hacerse con las riendas de su parcela, con avatares como la eliminación copera, esperpéntica, y la destitución de Paco López, de impacto emocional en el vestuario. Dio un giro arriesgado con Medina, convencido de que cuando posaran sus ideas, la escuadra recibiría mejor a los nuevos y motivaría a los que estaban. La victoria con el Cádiz se ha de convertir en el cambio de tercio. Una referencia para los que aterrizan de que la permanencia es posible aunque nadie en la historia lo lograra partiendo de esta puntuación.
Han venido y vendrán muchos fichajes, pero queda lo obvio: su rendimiento. Será lo que al final calificará a Tognozzi como referente de la comisión deportiva. Esto y que no pasen asuntos gestados a su espalda, como el cese de Milla. Su influencia tiene que abarcar esta parcela también, sin versos sueltos.
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