«Siempre hay que valorar un punto en Los Cármenes»
Sala de prensa ·
El entrenador del Eibar lamenta que los suyos estuvieron «a punto de hacer el segundo cuando peor estaba el Granada» aunque da el empate «por bueno»
De empate en empate, y ya son seis consecutivos, el Eibar continúa como líder de Segunda división tras unas nuevas tablas en Los Cármenes, donde ... bien pudo ganar. Su entrenador, Gaizka Garitano, dio «por bueno» el punto no obstante. «Estuvimos a punto de hacer el segundo cuando mejor estábamos nosotros y peor ellos. Fue una pena porque estuvimos cerca, pero el Granada es un buen equipo, con buenos jugadores, y siempre hay que valorar un punto aquí, aunque con el segundo tiempo que hicimos, y conteniendo tanto al Granada sin dejarle hacer ocasiones de gol, nos vamos con el regusto amargo de no haberlo matado tras ponernos por delante», reconoció sin embargo.
«Conocemos bien al Granada y sus puntos fuertes, con un potencial ofensivo terrible, y debíamos pararlos; Matheus salió bastante bien sobre Melendo», admitió Garitano. «Fue un partido muy táctico y en las últimas jornadas cuesta jugar limpio con el balón porque los jugadores sienten la responsabilidad y se corren menos riesgos. El Granada no tuvo ocasiones de gol claras porque nos defendimos bien, aunque nos costó con balón hasta que crecimos en el segundo tiempo», reflejó el entrenador, que cambió a sus tres delanteros tras adelantarse en el marcador porque «estaban muertos». «Hubo que correr mucho, los de arriba tuvieron un desgaste muy grande. En este tipo de partidos, todos jugamos con dos hombres por posición arriba por el ritmo al que se juega y el calor que hace porque es muy difícil aguantar noventa minutos con la presión y las vueltas hacia atrás», apuntó.
Acerca de la celebración tras el partido junto a los aficionados desplazados, Gaizka Garitano aclaró que más allá del botín lo hicieron por «agradecerles que viajen y se dejen la pasta para venir a animarnos porque Eibar está muy lejos de Granada». «Siempre lo celebramos con ellos, ganemos, empatemos o perdamos; tenemos que ir donde están para agradecérselo porque jugamos para ellos», explicó. «Solo fue un punto y dentro no lo celebramos demasiado porque los tuvimos ahí; la gente no estaba muy contenta», reconoció.
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