El Granada se sume en las tinieblas

Saltó el Málaga mucho más entonado que su rival al césped del Nuevo Los Cármenes y los pupilos de Javi Gracia tuvieron dos claras ocasiones para adelantarse en los dos primeros minutos. En primer lugar avisó el cuadro blanquiazul con un centro de Recio que cabeceó Camacho en el interior del área y Andrés Fernández despejó como pudo, teniendo la suerte de su lado al ver como dos atacantes blanquiazules no acertaban a controlar el rechace. Pocos segundos después un centro desde la izquierda fue cabeceado por Cop y Andrés Fernández realizó una esplendida parada salvando nuevamente el cero a uno cuando solo habían transcurrido dos minutos de juego.

Poco a poco el Granada fue asentándose, mejorando atrás y buscando entrar en el área contraria por las bandas. Como es habitual el equipo rojiblanco volvió a darle mucho protagonismo a su jugador más desequilibrante, Isaac Success, que estuvo algo más desacertado que en otras tardes. El Málaga volvió a rondar el gol en una acción en la que el ex rojiblanco José Luis Recio protagonizó un autentico jugadón por banda izquierda y que finalizó con un pase de la muerte a Cop, aunque incomprensiblemente el delantero croata terminó rematando el balón a las manos de Andrés.

El Granada se fue animando y un disparo de Doucs desde fuera del área inquietó a la escuadra malaguista aunque un zaguero logró despejar de cabeza. Mucho más clara fue la ocasión que tuvo en sus botas Isaac Success tras un control y un pase top de Rubén Rochina que permitió al atacante nigeriano quedarse solo ante Ochoa pero su disparo final en el mano se marchó demasiado cruzado y de esa manera fue imposible romper el empate a cero antes del descanso.

En la reanudación cabía esperar a un Granada motivado, dominador y cuanto menos peligroso pero lo más inquietante fue el hecho de ver cómo fueron pasando los minutos sin que nada trascendente sucediese. Los rojiblancos entraron en un bucle de pérdidas absurdas y llegadas estériles que no hacían presagiar nada bueno. No obstante, la afición local empujó aunque lógicamente el optimismo era moderado y más teniendo en cuenta que un centro de Camacho estuvo a punto de convertirse en el 0-1 si el remate final de Chory Castro, tras un buen control con el pecho, hubiera sido más preciso pero el balón acabó marchándose desviado por poco. El Granada tuvo la última ocasión clara del partido pero Success no supo definir en un nuevo mano a mano con el guardameta Ochoa, que despejó el balón a córner cuando el delantero nigeriano buscaba regatearle. Finalmente, el equipo de José González sumó su cuarto empate consecutivo aunque lo peor no fue el resultado sino la mala imagen ofrecida y la sensación de que con esa actitud el Granada tendrá prácticamente imposible conseguir la permanencia.