Ningún equipo de Primera acoge a tantos ex rojiblancos como el Levante

Entre los que pueden figurar en el once inicial del equipo levantinista el que más huella dejó en Granada fue el mediapunta Rubén Rochina. El atacante nacido en Sagunto llegó al Granada en el verano previo a la temporada 2014/15, en la que las lesiones y la competencia en su demarcación con otros futbolistas de más experiencia como Piti o Colunga no le ayudaron a dar su mejor nivel (jugó 19 partidos en los que anotó apenas dos goles).

Mucho mejor fue su rendimiento en la temporada 2015/16, en la que sí se hizo indiscutible en las alineaciones de los técnicos rojiblancos –Sandoval y José González– y en la que conquistó los corazones de la hinchada gracias a su calidad y a su talento con los disparos desde media y larga distancia, acabando la temporada con seis goles anotados en los 35 encuentros que disputó. Tras el cambio en la propiedad del Granada, la nueva directiva encabezada por John Jiang lo traspasó al Rubin Kazan por 8,5 millones de euros, una cantidad que con el paso de los meses tuvo que ser renegociada por los problemas económicos que atravesaba el equipo ruso.

Menos polémica suscitó la salida de Oier Olazábal, portero que le disputó el puesto a Roberto Fernández en la temporada 2014/15, el primero de sus dos cursos en el Granada, donde llegó procedente de un FC Barcelona en el que nunca se llegó a consagrar. Oier jugó en aquella campaña 14 partidos en los que encajó un total de 27 goles y, tras ser cedido a la Real Sociedad, no tuvo ningún protagonismo en el Granada durante la campaña 2016/17, estando siempre a la sombra de 'Memo' Ochoa y marchándose al Levante en la segunda vuelta de la competición. Sería raro que el guardameta vasco fuera titular en Los Cármenes porque Paco López viene confiando en el ex del Numancia Aitor Fernández durante este primer tramo del campeonato, habiéndole otorgado la condición de titular en las 16 jornadas que se llevan disputadas hasta la fecha.

Recuerdo infausto

Uno de los centrales que se ha consagrado en el Levante en los últimos meses es el portugués Rubén Vezo, que amplió su relación con la entidad levantinista el pasado verano después de haber jugado cedido la pasada campaña por el Valencia CF. Precisamente en calidad de cedido por el Valencia llegó al Granada en los últimos días del mercado de fichajes de la temporada 2016/17, en la que se esperaba que fuera una de las piezas claves en el sistema defensivo del Granada de Paco Jémez.

A Vezo no le fueron nada bien las cosas en la capital de la Alhambra y, al igual que sucedió con la inmensa mayoría de los jugadores que el Granada acogió como cedidos en aquel año, su préstamo terminó siendo decepcionante. Vezo, que terminó participando en 18 partidos de Liga y en uno de Copa del Rey, no se entendió en aquella campaña ni con Lombán, ni con Saunier, ni con Gastón Silva y tampoco con el islandés Ingason, que llegó como refuerzo en el mercado invernal sin detener la sangría defensiva de aquel Granada que terminó siendo el equipo más goleado de Primera.

Las actuaciones del central fueron irregulares y terminó la temporada jugando en el carril derecho y marcándose un gol en propia puerta en el último partido de Liga que disputó como rojiblanco en Los Cármenes, ante el RCD Espanyol (1-2). Este sábado es baja segura porque sufre una rotura del menisco externo de la rodilla izquierda que lo mantendrá lejos de los terrenos de juego hasta el próximo mes de enero.

De los cuatro exrojiblancos citados anteriormente, el único que no tiene ficha con el primer equipo del Levante es el joven central Eliseo Falcón. El defensor hispalense, de 22 años, militó durante las dos últimas temporadas en el Recreativo Granada, sin llegar a dar el salto al primer equipo nazarí.

Ni en la campaña 2017/18 –en la que Pablo Vázquez y Fran Serrano se hicieron fuertes en el centro de la zaga– ni en la 2018/19 –en la que Héctor y Serrano fueron los centrales que más jugaron– consiguió consolidarse en el filial rojiblanco, que no contó con él de cara a esta temporada, por lo que hizo las maletas y se embarcó en el proyecto del Atlético Levante, equipo del Grupo III de Segunda B en el que sí le están saliendo bien las cosas a nivel personal, pues ha jugado 12 partidos esta temporada y todos ellos en condición de titular.

Ante la plaga de bajas que asola la defensa del conjunto levantinista, a Eliseo le llegó la oportunidad de debutar en Primera con el Levante la pasada jornada, en la que fue titular junto a Coke en el centro de la zaga granota. Sin embargo, su experiencia en el Levante-Valencia no fue todo lo positiva que hubiese querido porque acabó siendo expulsado por doble amarilla en el minuto 74 y su equipo perdió el derbi por 2-4. En las horas posteriores comentó en Twitter que se sentía «muy feliz y muy agradecido» por la experiencia, aunque también «triste por no haber podido lograr la victoria y por haber dejado con 10 jugadores» a su equipo.