Molina y Negredo, dos goleadores sin edad se niegan a dejar el fútbol

Las dudas que generó el fichaje de Álvaro Negredo por el Cádiz aquel verano de 2020 fueron muy similares al de Jorge Molina apenas unas semanas después por el Granada, con tres años más, aunque este sí llegase desde el Getafe sin haber faltado a una sola convocatoria. Aunque con un rol secundario como escudero de Roberto Soldado –excompañero de Negredo en el Real Madrid Castilla–, Jorge Molina concluyó la temporada como el máximo goleador del 'EuroGranada' con ocho dianas en Liga, dos en la Europa League y otro en su previa y cuatro en la Copa del Rey. Esta campaña, con la marcha de Soldado, ha tenido que asumir un rol superior con una respuesta inmejorable cuando el equipo más la necesitó, aunque en 2022 aún no ha visto puerta.

Jorge Molina tiene 39 años y cumplirá 40 en abril, mientras que Álvaro Negredo cuenta 36 y hará 37 en agosto. Sin embargo, ambos son opciones muy valoradas por sus dos entrenadores. El cadista, a diferencia del rojiblanco, sí contó con la vitola de titular desde el principio de temporada, manteniéndole Cervera los galones que se ganó el curso anterior. Sin embargo, y con solo dos dianas ante Betis y Mallorca –más allá del 'hat trick' copero al Villa Fortuna en primera ronda–, empezó a desaparecer de los planes del entrenador. De hecho, no tuvo ni un minuto contra el Granada en la primera vuelta. Tampoco frente a Osasuna en El Sadar, el último encuentro de Liga que dirigió Cervera.

La situación de Álvaro Negredo en el Cádiz ha dado un vuelco con el relevo de Sergio González. Ha sido titular en los cinco partidos de Liga que ha dirigido y solo le ha sustituido una vez. Negredo le ha respondido con tres goles: inició un amago de remontada al Espanyol, abrió la lata frente al Levante y forzó las tablas con el Getafe en la última jornada. Se encuentra en su mejor momento de la temporada y, frente a los azulones, Sergio optó por alinearle en una delantera de tres hombres junto a Lucas Pérez y Anthony Lozano.

Pasa por todo lo contrario Jorge Molina, que no ha conseguido ver puerta en los siete partidos que ha jugado en lo que va de año. Lo arrancó como titular indiscutible, el rol que se ganó con el cambio de sistema del equipo del 4-3-3 al 4-4-2 y con siete goles en Liga además de otros dos en Copa. Sin embargo, los fichajes invernales le desbancaron de la titularidad ante Real Madrid y Real Sociedad, salidas en las que Robert Moreno prefirió emplear a Álex Collado como segundo punta con responsabilidades en la creación del juego, así como al joven Matías Arezo de inicio en San Sebastián.

El de Alcoy regresó a la titularidad el pasado sábado frente al Villarreal, como otros nueve compañeros que ya militaban en el equipo la campaña anterior. Aunque jugó 87 minutos de partido, volvió a estar lejos de su mejor versión. Se le vio lento en alguna acción de contragolpe en la que tampoco llegó a entenderse con Luis Suárez.

Irreemplazable el colombiano, no está nada claro quiénes le acompañarán frente al Cádiz en el derbi del lunes. Ante el Villarreal, Robert Moreno dispuso durante muchos minutos y tras el descanso un tridente con Myrto Uzuni apareciendo por sorpresa unos pasos por detrás de Luis Suárez y Jorge Molina, entrando en ruptura. Sin embargo, el albanés erró ante Rulli, al igual que Luis Suárez.

Entonces no tuvo minutos Arezo, que sí podría volver a contar con una oportunidad contra el Cádiz. Ya mostró maneras en su estreno frente a la Real Sociedad, aunque evidenció que acababa de aterrizar en su nueva realidad. Pudo adelantar a su equipo, pero también perdonó solo ante Remiro como otros compañeros hicieron contra el Villarreal. El Granada necesita goles y echa en falta los de Jorge Molina.