La lesión de Miguel Rubio se queda en un esguince
El central permanece aún a la espera de nuevas pruebas para certificar si la afectación en el peroné es menor de lo que al principio se temió
La lesión que Miguel Rubio se produjo en El Sadar se queda, por lo pronto, en un esguince de grado II en su tobillo derecho ... de acuerdo al parte médico difundido por el club este domingo. Una vez repetidas en Granada las pruebas a las que el central madrileño fue sometido la misma noche del partido en un hospital de Pamplona, el diagnóstico de su percance es de mucha menor gravedad de la que al principio se temió.
No obstante, los servicios médicos del club seguirán explorando el peroné de su pierna derecha para certificar con el paso de las hora si la afectación sobre este hueso es mayor o no. De ahí que, en su comunicado, el club indique que su servicio médico está aún «valorando el tratamiento óptimo para dicha lesión» y que su pronóstico «queda pendiente de evolución».
Por otro lado, el Granada informó también de una nueva lesión fibrilar de Jesús Vallejo en el músculo isquiosural de la pierna izquierda, zona que mantiene dolorida desde que sufriera una rotura en la primera jornada frente al Atlético de Madrid pese a los minutos que jugó contra el Barcelona en Los Cármenes.
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