Puerta a cero para Aarón antes de recibir competencia

No obstante, el encuentro de Aarón dejó más sombras que luces. A un portero se le pide que transmita seguridad a su defensa y al resto del equipo y el meta valenciano no lo hizo ayer, algo que sin embargo sí ocurrió en encuentros de Copa del Rey o de Liga de la pasada temporada. Imbuido por el espíritu de Molina, jugó excesivamente adelantado. El avance de la temporada mostrará si es una seña de identidad marcada por Robert Moreno o si él realmente se siente seguro jugando tan lejos de su portería. Parece más lo primero porque no estuvo acertado asomándose en tantas ocasiones al balcón del área. De hecho, en la primera mitad una de las mejores ocasiones del Villarreal vino precisamente precedida de una salida a destiempo del valenciano, que se incrustó fuera del área como un central más y dejó el marco abierto para los locales. Para colmo se encontró frente a Gerard Moreno, que olió la sangre pero se escoró demasiado ante la presencia de la zaga rojiblanca. Aarón tuvo tiempo para volver hacia atrás y detener el disparo de Yéremi Pino, que tampoco iba con mucha intención.

Precisamente esa intención fue la que le faltó al Villarreal en ataque en la noche de ayer. Aarón lo tuvo que agradecer porque entre los tres palos apenas se le probó. De los catorce disparos a meta que generaron los amarillos solo cuatro fueron contra el arco. La exigencia a la que se le sometió no fue tanta como se esperaba de un campeón europeo. Hubo mordiente de los 'groguets', pero el miedo en el cuerpo solo lo metieron en un par de ocasiones. Al final del partido, de nuevo Gerard Moreno estuvo cerca de doblegar al valenciano. Lo hizo. Le amagó en el mano a mano y lo tumbó, pero Foulquier apareció al rescate para que el rosco no desapareciera del marcador local y Aarón pudiera sacar pecho.

Lo tendrá que hacer esta semana porque la competencia ya la tiene en casa. Hoy se anunciará el fichaje de Luís Maximiano por el Granada, que ayer ya posó con la camiseta nazarí. El club se ha dejado en el cancerbero portugués 4,5 millones de euros, que serán cinco si el equipo se queda en Primera. El mensaje para Aarón Escandell es claro. Maximiano llega al equipo para ser titular y muy bien lo deberá hacer el meta valenciano para conservar su puesto. Todo es teoría, pero resulta complicado imaginar al fichaje más caro de esta temporada sentado en el banquillo hasta que comience la Copa del Rey.

Esto abre también un escenario incierto para Aarón. Después de tres temporadas a la sombra de Rui Silva, el cancerbero del Granada veía en esta temporada su verdadera oportunidad para alzar el cuello en Primera división. Ahora, con otro portugués llamado a hacerle sombra, tiene que decidir –en el caso de que finalmente pierda el puesto en la portería– si continúa un año más en la retaguardia u opta por salir a otro equipo en el que adquiera el protagonismo que entiende que se merece tras tres temporadas creciendo en el club rojiblanco. Ayer, Robert Moreno dejó a Joao Costa en Granada –como a otros jugadores– para invitarle a salir del club antes de que se cierre el mercado. Cuenta con Aarón, pero para el valenciano puede no ser suficiente seguir un año más a la sombra. Quedan quince días para que el baile de jugadores se consume y a partir de hoy se verá si Aarón está más cerca de salir o de quedarse.