Leo Matos deja el PAOK por la enfermedad de su padre
El lateral brasileño era una de las estrellas de los griegos, pero una urgencia familiar le ha hecho volver a casa
Miércoles, 28 de octubre 2020, 00:53
El PAOK y Leo Matos han llegado a un acuerdo para dar por terminado su contrato, sin que el club quisiera hacerlo en ningún momento ... . El lateral diestro brasileño de 34 años es, según el presidente de los griegos, Ivan Savvidis, «uno de los mejores fichajes en la historia del club». Y eso es ya: historia. El jugador no estará ya ante el Granada este jueves, algo que ha conmovido a la hinchada que, no obstante, entiende las razones de su marcha. El padre del jugador sufre una dura enfermedad y Matos ha pedido al PAOK salir con la carta de libertad hacia la liga brasileira para pasar más tiempo con él y el resto de su familia.
Así, el sudamericano antepone su situación personal al dinero o el esplendor de seguir jugando en Europa y en competiciones intercontinentales. Con la camiseta albinegra, Matos ha jugado 169 partidos oficiales, anotando 26 goles y dando 15 asistencias. Todo desde una posición de lateral derecho en la que no ha tenido rival estos últimos años en el campeonato griego. En su maleta tendrá que hacer hueco a las tres Copas que ha ganado con las águilas bicéfalas y a la Liga que conquistaron acabando imbatidos. Matos tuvo un papel inolvidable en las cuatro gestas.
El que fuese árbitro internacional, el checo Lubos Michel, fue quien ayudó a Matos a cerrar su firma por el PAOK, una vez Michel había colgado el silbato y se adentraba en la red de representantes y directivos del fútbol ucraniano. Matos llegó a los griegos en 2016 a coste cero –aunque algunos portales recogen un coste de un 'kilo' y medio en concepto de prima– y se convirtió en la estrella en pocos partidos. «Leo se preocupa por su familia. No le interesa el dinero. Irá a Brasil, donde el fútbol es más lento y puede jugar al menos otros tres años. Es un profesional, no bebe, no fuma, no sale», explica Michel en un programa de fútbol brasileño.
Para el PAOK se abre un duro capítulo, sin la presencia ya de un jugador que era fijo en el esquema de Abel Ferreira, sobre todo en partidos europeos. La cesión de Moussa Wagué, procedente del Barça, adquiere ahora una nueva dimensión y el senegalés tendrá que dar un paso al frente para tapar la marcha de toda una institución. «Buena suerte, amigo. Eres un ganador y nuestras puertas estarán abiertas para ti porque la familia es lo primero», se despidió el hijo del dueño del PAOK, Giorgis Savvidis.
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