Sin mal de altura ante el colista

Insistió durante toda su comparecencia en que la distancia que separa en este momento a ambos equipos en la tabla no tiene por qué implicar una versión más replegada del Leganés. El Granada se ha ganado el respeto de la categoría y quizás sea el de hoy un partido en el que se deban abordar soluciones nuevas ante una defensa más cerrada, habitualmente constituida por hasta cinco hombres. Será un duelo, más allá de entre el quinto clasificado y el colista, por ahora un hecho circunstancial, entre el tercer máximo goleador de la categoría y el segundo que menos tantos convierte, con tres, sólo por delante del Alavés, con dos. Diez de diferencia.

Los de Mauricio Pellegrino se centran por ahora en la fortificación de su propia portería. Fueron un conjunto fiable en ese aspecto la pasada temporada, salvados con 45 puntos al golear con autoridad en el primer partido de mayo al Sevilla en el Sánchez Pizjuán. Deben corregir una faceta en la que viene presentando problemas en estos primeros partidos. El de Pellegrino, al igual que el de Diego Martínez, es un bloque que apuesta por la continuidad más allá de que se haya reforzado como todos los demás. Hay ciertos patrones comunes entre ambos equipos, que priorizan la competitividad sobre el terreno de juego sobre cualquier otra virtud como la principal. Por más colista que sea en la actualidad, tras seis partidos, el Leganés es un hueso duro de roer.

A buen seguro Diego Martínez lo habrá advertido a los suyos, que alcanzan la cita mermados por la primera jornada intersemanal pero relativamente más frescos que sus rivales por las cinco novedades que presentó la alineación de Pucela respecto a la que se impuso al FC Barcelona en Los Cármenes, siete respecto a la que ganó en Vigo. Todos cuentan para el entrenador nazarí, consciente de que su plantilla es corta pero polivalente, y que una de las claves de la temporada pasará por tener a todos sus elementos activos. Martínez volvió feliz de Valladolid porque su equipo no perdió y, sobre todo, porque sumó nuevos efectivos a lo que denomina «la causa», con una dosis de épica en la denominada 'Resistencia rojiblanca'. José Antonio en la zaga, Gonalons en el medio o Vadillo, Adrián Ramos y Carlos Fernández en el ataque trataron de reivindicarse como opciones fiables desde el inicio para los siguientes compromisos. Parece claro que al francés le queda todavía para ser de la partida, pero el buen partido de Carlos Fernández primero como segundo punta y luego como referencia podría darle una nueva oportunidad, ya en casa.

Una de las dudas hasta última hora que presenta el equipo de Diego Martínez es la de Roberto Soldado. El veterano delantero acabó muy cargado ante el FC Barcelona, con hielo en su muslo derecho el resto del partido, y aunque viajó a Valladolid no tuvo ni un minuto, quizás por la necesaria sustitución de José Antonio Martínez por Germán. En la única sesión a puerta abierta de la semana se quedó trabajando en el interior de la instalación, poniéndose a punto. Su presencia ante los tres centrales que podría presentar el Leganés se antoja fundamental.

Los kilómetros que acumula, entre otros, Ángel Montoro, invita a pensar en la opción de Ramón Azeez como una alternativa para la titularidad. Respaldado por su inmensa actuación ante el FC Barcelona y los dos goles que ya cosecha en su haber, el nigeriano es una pieza muy apreciada por Diego Martínez incluso en una posición adelantada como un activo interesante en la presión, marcador del ritmo de su equipo. Podría dar relevo al valenciano o incluso repetir el rol que ya ejerciese ante el conjunto azulgrana. Su polivalencia lo llevaría incluso al lateral derecho en caso de una supuesta lesión de Víctor Díaz, sin otra alternativa en la plantilla.

No es el Leganés un equipo que traiga buenos recuerdos al Granada, por lo que conviene todavía menos confiarse. Apenas se han cruzado dos veces en Liga y en ambas ocasiones ganaron los pepineros gracias a un solo gol en cada encuentro. Dos duelos de fatídico recuerdo nazarí. En la medular estará Rubén Pérez, que volverá a la que quiso que fuera su casa. Diego Martínez, a quien la historia no le dice nada, quiere seguir sumando.

Alineaciones probables:

Granada: Rui Silva; Víctor Díaz, Domingos, Germán, Carlos Neva; Montoro, Yangel Herrera; Puertas, Carlos Fernández, Darwin Machís; y Soldado.

Leganés: Soriano; Marc Navarro, Bustinza, Omeruo, Siovas, Jonathan Silva; Rubén Pérez, Roque Mesa; Óscar Rodríguez; En-Nesyri y Carrillo.