Alberto Soro vuelve a ser titular, pero apenas aparece

Aunque el partido del Granada en términos globales fue malo, Alberto Soro no logró destacar a nivel ofensivo como si hicieron otros compañeros. Luis Suárez y Jorge Molina se guisaron un gol, mientras que Machís y Puertas ejecutaron otro. Pero Soro apenas participó. En el primer cuarto de hora estuvo voluntarioso y activo por la banda derecha, siempre buscando la diagonal hacia el centro del ataque nazarí. Sin embargo, apenas tuvo el balón y tampoco estuvo respaldado por Dimitri Foulquier en la incorporación, como si ocurriera en el partido ante el Real Madrid. Pasada la media hora de juego intentó crear una jugada, sin éxito. Y más tarde el equipo ejecutó en una transformación táctica que le afectó. Adrián Marín fue retrasado en el carril zurdo, Quini enviado a la derecha y Soro ocupó una posición más centrada. Allí tampoco estuvo acertado y si tenía poco apoyo con Foulquier en la derecha menos aún tuvo por la zona más interior. Así, sin apenas presencia del futbolista zaragozano en el ataque nazarí se consumió la primera parte.

Poco cambió la participación de Soro en el segundo acto. Se libró del cambio en el descanso, pero con Machís calentando la banda se sabía que Diego Martínez no iba a tardar mucho en sacarlo del terreno de juego. Soro era el recambio natural, por lo que apuró sus últimos minutos del partido de nuevo por la izquierda, al salir Adrián Marín y entrar Antonio Puertas, algo que devolvió a Quini al lateral zurdo. Alternó el costado con la mediapunta en varias acciones de ataque, intentando alguna distribución entre líneas, pero no lo logró. No llegó a la hora de partido y Diego Martínez lo requirió en el banquillo. Fue un partido gris del futbolista rojiblanco.