El Granada empieza a revalorizar todas sus inversiones en fichajes

2. De todos ellos, Milla (26 años, 5 millones) es el más afianzado en las alineaciones. A Suárez (22 años, 6 millones por el 50% de su pase), de incorporación más tardía, le ha llevado más semanas el acoplamiento, pero ya empieza a golear como se ha visto en el doble cruce con el Omonia. Soro (21 años, 2,5 millones según fuentes próximas a la negociación) había ejercido de actor de reparto hasta la fecha, agregando minutos al contador en las segundas partes de algunos encuentros. Diego Martínez le dio el testigo el jueves y lo agarró con firmeza.

3. El club nazarí emprendió una política de contrataciones ambiciosa hace unos meses, con el mayor gasto en fichajes de su historia. El reto era ratificar la participación del equipo en la Europa League y, a partir de ahí, continuar con la consolidación en la máxima categoría.

4. La trayectoria ha sido propicia hasta la fecha pese a llevar tres semanas sin ganar en Liga (con unas circunstancias particulares). Arrancó como un tiro, de ahí que siga en la zona europea, manteniendo la fiabilidad en la UEL. En el camino, ha ido integrando a sus nuevos futbolistas con naturalidad. Unos lo han hecho más rápido que otros, pero todos están contando. Soro y Nehuén, anecdóticos en cuanto a presencia hasta la fecha, ya sí se pueden considerar en dinámica completa.

5. Milla confirmó desde las primeras fechas que el dinero invertido en él había merecido la pena. Protegido por su técnico tras su error en una conducción con el Valladolid, salió con confianza frente a los chipriotas y volvió a dar muestra de sus enormes facultades para dar dinamismo al centro del campo, máxime en la primera cita sin un galvanizador como Montoro.

6. Suárez combate contra los defensas y con su propia ansiedad, que ya modula a medida que encuentra comprensión a su alrededor por parte de sus compañeros. Físicamente es un animal y su derroche encuentra sentido cuando le llegan pases profundos al espacio, para que exhiba potencia y pegada.

7. Quien mejor le podía entender era uno que había sido su socio durante toda la temporada anterior. El colombiano y Soro coincidieron en el Zaragoza y eso sella alianzas. Una sociedad importada en la que el maño filtra pases a conciencia para que 'Lobezno' saque sus garras. El '26', aparte de visión de conjunto, progresa acariciando el balón con calidad. Su carácter algo frío contrasta con el temperamento volcánico de Suárez. Dos perfiles que dividen aficiones pero que se abrazan felices en el campo.

8. Ganar es fundamental para solidificar los cimientos del proyecto, pero amortizar lo depositado por sus jugadores también es clave de cara a que las cuentas cuadren. Sus apuestas no sólo no se han depreciado, sino que se están revalorizando.

9. A ello habría que añadir el crecimiento de Domingos Duarte o el estado de forma de Vallejo, que vuelve a ser aquel zaguero por el que pagó el Real Madrid. Aparte de lesionados como Quini o Azeez, sin apenas vuelo (nada del primero aún), el único elemento que aún no ha logrado enchufarse de la plantilla es Fede Vico. Fue titular el finde pasado y vuelve a tener una oportunidad de contar en Vigo si así lo estima su técnico, pues no está en la lista UEFA.

10. Por él, el Granada soltó en su día 250.000 euros, lo pactado con el Leganés en caso de ascenso. Tuvo aquella fea lesión en la planta del pie y no ha vuelto a ser el mismo. Aún está a tiempo de asomarse a la ventana. Acaba contrato y necesita reivindicarse. Seguro que Diego Martínez no lo da por perdido aún.