El Granada se agarra a la lucha europea
Derrota al Eibar 35 años después de la primera vez y se pone a siete puntos de los puestos con premio clasificatorio
Rafael Lamelas
GRANADA
Jueves, 22 de abril 2021, 23:02
El Granada superó un trauma enquistado para agarrarse a la lucha europea. No ganaba al Eibar desde la primera vez que se enfrentaron hace ... ya 35 años, cuando sesteaban ambos por Segunda B. Desde entonces, dos empates y siete cocotazos, algunos de ellos de los que noquean y dejan cicatrices. Una bestia peluda que ahora tiene mandíbula de cristal. La victoria se cultivó en una efectiva primera parte. La segunda mitad se estaba convirtiendo en un verdadero dolor de cabeza hasta que el Eibar entró en estado de demolición cuando Kenedy, fulgurante, salió a despejar dudas. Fue una de esas citas para piernas fuertes, poco aptas para paladares selectos, pero igual de provechosas para el inventario. Holgada para regocijo local.
Noticia Relacionada
«El Granada se ha quitado un trauma de encima»
El triunfo aproxima a los rojiblancos al sector que guarda premio clasificatorio. Son siete puntos de diferencia con Villarreal, séptimo, y Betis, sexto, pero los rojiblancos tienen un partido menos –aunque sea en el Camp Nou- y un duelo directo pendiente con los verdiblancos en el calendario. También parecía quimérico la temporada pasada y el jolgorio llegó en la última jornada. Quién sabe si el destino esconde aún alguna sorpresa en lo que parecía el epílogo del curso. La emoción cotiza al alza.
Granada
Rui Silva; Foulquier, Germán Sánchez, Vallejo (Nehuén, m. 85), Quini; Montoro (Víctor Díaz, m. 71), Yangel Herrera, Antonio Puertas, Darwin Machís (Kenedy, m. 71); Jorge Molina (Gonalons, m. 50) y Roberto Soldado (Carlos Neva, m. 85).
4
-
1
Eibar
Dmitrovic; Arbilla, Sergio Álvarez (Cote, m. 60), Olivera, Rafa Soares (Pedro León, m. 46); Diop (Quique, m. 60), Atienza, Recio; Pozo, Bryan Gil (Unai, m. 83) y Kike García (Rodrigues, m. 83).
-
GOLES 1-0, m. 22: Roberto Soldado; 2-0, m. 37: Antonio Puertas; 2-1, m. 64: Kike García; 3-1, m. 77: Roberto Soldado; 4-1, m. 81: Kenedy.
-
ÁRBITRO Santiago Jaime Latre (comité aragonés): Amonestó al local Jorge Molina (m. 41); y al visitante Recio (m. 42) .
-
INCIDENCIAS Partido correspondiente a la jornada 31 de LaLiga Santander, disputado en el estadio Nuevo Los Cármenes, sin público en las gradas por las restricciones de la pandemia.
En uno de esos partidos en los que quizás zapea Florentino Pérez, el Granada gozó de la precisión ante la red que le faltó en el doble cruce con el Manchester United. Se tomaron el entuerto con seriedad ante un Eibar que tiende a la depresión sin mucho remedio. Dice Mendilibar que ya no reconoce a sus pupilos y es cierto que han perdido la impronta guerrera. Su escudo cede con cada dardo en forma de gol. Tuvieron una fase animada cuando se pusieron 2-1, pero les duró menos la ilusión que la Superliga.
Diego Martínez apostó por dos puntas, solución de ciertos encuentros y un sistema que empleó de arranque con el Molde, hace ya muchas semanas. Era la fiesta de cumpleaños de Jorge Molina, 39 'castañas' entre pecho y espalda, pero el que descorchó el champán fue su compañero en el particular 'Dúo Dinámico' rojiblanco. Soldado entonó el 'Resistiré' a poco más de un mes de llegar a los 36. Doblete para sucederle como pichichi nazarí.
Fue una diana con mucho suspense. El Eibar colocó su zaga en el filo de la navaja y el valenciano exploró sus límites, entrando y saliendo de la zona prohibida. Puertas le dio el pase justo en el momento en que Arbilla, con unos torpes pasos atrás, rompía la celada. El 'nueve' festejó en diferido, con abrazos reposados.
El Granada apostaba por el mismo brío que los vascos, pero con un margen de atención superior. Tuvo un momento de relajo tras el 1-0, en una acción que quizás habría quedado suspendida por posición ilegal de Bryan Gil en el inicio, pero que sirvió para que Rui Silva exhibiera su habilidad taponadora. El portugués, con su envergadura, habría hecho carrera también bajo el aro. Manoteó con su zurda las intentonas del chico de Barbate y de su compatriota Rafa Soares.
Gil, el flamante internacional, encontró un perro de presa en Dimitri Foulquier, al que le gusta tener este tipo de misiones concretas, robarle la merienda al niño sin pudor. El duelo adulto estaba justo al lado, entre Germán y Kike García, dos osos pardos, del fútbol de antes, de tentetieso. Dos jornaleros que se ganan el pan.
Los locales seguían a lo suyo y se alumbraron en un córner. Las flechas de la pizarra encontraron su sentido en un saque corto que colgó Montoro. Herrera emprendió el vuelo, pero con las alas recogidas, y Recio, uno de los exnazaríes en las filas armeras, tuvo la desdicha de rozar el balón perdido y enviarlo, sin querer, hacia la posición de Puertas, con fuego en la mirada. Sacó la maza y otro roce enemigo, en Atienza, hizo lo demás para dejar a Dmitrovic enervado.
Con muy poco, el Granada había vaciado el árbol de fruto y Montoro se permitió el lujo de probar fortuna desde su campo en un rechazo que ya hubiera mandado al diván al portero serbio del Eibar. Mendilibar bramaba con furia, descompuesto. Sacó a Pedro León y retrasó al lateral a Alejandro Pozo, otro que dejó parte de su corazón en Los Cármenes y que, para su desgracia, va camino de un segundo descenso consecutivo –el otro fue con el Mallorca-.
Diego acopló a Gonalons por Molina para recuperar el cetro de mando y el Eibar escarbó en algunos córneres. Pedro León se aprovechó de un golpazo de Vallejo cabeza con cabeza en una disputa con el recién entrado Quique para protagonizar una incursión letal, pero el murciano picó en exceso a la hora de apuntillar.
Se quedó algo atolondrado Vallejo tras el choque previo y de eso sacó tajada Kike García, que evitó el cuerpo a cuerpo con Germán en el flanco del maño. El bigardo se giró delante de él, le hizo un caño en el recorte y chutó de palanca para recuperar el suspense.
No tardó en contestar el Granada en un córner que peinó Gonalons y al que no llegó Soldado por el flequillo. El temor, sin embargo, se instaló en la otra área, con un doble fallo de León y Kike García, que en lugar de empatar le dio con el serrucho a Germán.
A Diego le preocupó la deriva y plantó un dique con Víctor Díaz como tercer central, con Kenedy para alegrar el ataque. El brasileño con espacios es un purasangre y nadie en el Eibar le supo poner las riendas. Llegó con la bandeja para servirle otro trago a Soldado, brindando por su salud.
No se conformó con ello el de Santa Rita do Sapucaí, al que le iba a invitar a una ronda un adversario. Cote, al poco de salir, trató de hacer una cesión de cabeza hacia Dmitrovic que se le quedó cortísima, jugosa para Kenedy, que abusó ya de un contrincante desfigurado, que languidece.
Dos victorias seguidas del Granada en Liga por primera vez en la segunda vuelta. 42 puntos que igualan la mejor marca del anterior ciclo en Primera. El récord lo ostenta este mismo Granada en el ejercicio anterior, con 56. Un listón que parece inalcanzable, pero con este equipo sin complejos que supera negras estadísticas nunca se sabe.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión