El Granada acelera su mercado y cierra los refuerzos antes de la competición

La dirección deportiva del Granada confirmó hasta la fecha las incorporaciones de siete futbolistas. Se trata del guardameta Luca Zidane, los defensas Pablo Insua, Loïc Williams y Manu Lama -este último se oficializó en la tarde del domingo-, el lateral Rubén Sánchez, el centrocampista Manu Trigueros y el atacante Giorgi Tsitaishvili. Todos ellos se convirtieron en rojiblancos con antelación hasta la primera jornada ante el Albacete. Los primeros en hacerlo fueron Insua y Zidane. Sus fichajes vieron la luz antes incluso del arranque de la pretemporada del equipo de Guille Abascal, lo que posibilitó su temprana integración en el grupo.

En el caso del coruñés, su incorporación se hizo oficial en junio. Para la del portero hubo que esperar unos días más hasta el 5 de julio. Una diferencia de más de tres semanas con respecto al mercado de la pasada campaña. En 2023 el Granada no firmó a ningún jugador hasta el 15 de dicho mes. Fue la cesión del madridista Jesús Vallejo, a la que siguió la llegada de Gerard Gumbau en propiedad tras quedar libre del Elche el día 27. Para entonces, la actual dirección deportiva ya tenía atados al doble de refuerzos con las operaciones de Rubén Sánchez y Giorgi Tsitaishvili, ambos cedidos desde Espanyol y Dinamo de Kiev respectivamente.

Los siguientes fichajes del último curso no llegaron hasta el mes de agosto. Gonzalo Villar lo hizo traspasado de la Roma el 4 de agosto, mientras que Wilson Manafá no fue granadinista hasta el 7. Dos defensas y dos mediocentros a menos de una semana para el comienzo de Primera División, categoría a la que regresaba y a la que se debía adaptar en cuanto a plantilla el conjunto que dirigía Paco López. El salto no se completó. Con la liga ya empezada la entidad se reforzó con el exfranjiverde Lucas Boyé, fichado en propiedad el 30 tras soltar poco antes a Samu Omorodion al Atlético de Madrid mediante el pago de su cláusula de salida.

Tres días más tarde la guinda al mercado fue el cedido Álvaro Fernández Carreras, hombre de banda izquierda que cuajó una notable primera vuelta hasta su regreso al Manchester United en enero. El gallego fue traspasado al Benfica, dejando huérfano el lateral y obligando al Granada a acudir a la ventana de invierno para completar aún más una plantilla que había quedado coja meses antes. Entonces el actual director deportivo Matteo Tognozzi ya había sustituido a Nico Rodríguez. El italiano trajo un elevado grupo de refuerzos entre los que destacaron Augusto Batalla, Bruno Méndez o Facundo Pellistri.

De aquellos movimientos del último enero surgió parte de la columna vertebral del Granada para esta temporada. Efectivos como Marc Martínez, Kamil Jozwiak, Theo Corbeanu o Martin Hongla continúan en el equipo de Guille Abascal después de quedar a las órdenes del 'Cacique' Medina y José Ramón Sandoval. Todos cuentan para el cuerpo técnico, que deberá sacar su máximo rendimiento con la misión de competir lo mejor posible en una igualada Segunda.

Loïc Williams, Manu Trigueros y Manu Lama, fichajes restantes de la entidad por ahora este verano, se sumaron a la plantilla del primer equipo antes del primer partido oficial. Un cambio en la estrategia nazarí para fomentar a tiempo la integración de todas las piezas en el engranaje de Abascal, el encargado de poner a punto su maquinaria para que el tren no vuelva a descarrilar por segundo año consecutivo.