Yan Eteki quiere recuperar su sitio

Tras aquel incidente, que ocurrió el 29 de agosto, a Eteki se le diagnosticó un esguince del ligamento lateral interno de la rodilla derecha. Estuvo prácticamente un mes fuera de combate. Recibió el alta antes del desplazamiento a Valladolid, aunque se convirtió en el descarte de la lista de 19 que se llevó Diego Martínez para el encuentro celebrado el pasado 24 de septiembre. Luego se quedó aparte, por decisión técnica, de la convocatoria para el duelo frente al Leganés en casa unos días después. Cuando ya iba entrando en dinámica, se dobló el tobillo izquierdo en la sesión del martes 1 de octubre. El parte médico reflejó que tenía un esguince de grado II en la articulación. Parecía que estaría varias semanas en el dique seco por pura estimación, pero la sorpresa llegó cuando este mismo lunes ya hizo readaptación y ayer se incorporó al trabajo con el grupo para desaparecer del listado de bajas. Una recuperación exprés justo cuando su equipo más lo necesita.

Eteki es un futbolista de sólo 22 años con unas condiciones colosales. Formado en el filial del Sevilla, allí coincidió con uno de sus grandes valedores para defender su incorporación al Granada, el propio Diego Martínez. Sabía que encontraría una alumno aplicado, con mucha disciplina, que de alguna manera cubría el vacío dejado por la marcha forzosa de Fede San Emeterio al Valladolid.

La temporada pasada estuvo cedido por el conjunto hispalense en la UD Almería, donde se acabó haciendo con un puesto indiscutible en la medular. «Empezó sin jugar, estaba sin mucho ritmo, pero cuando entró en el equipo se convirtió en una de las claves», apunta Juan José Aguilera, redactor de Deportes de IDEAL en Almería, que constata que maravilló en el partido de Copa ante el Málaga en el eliminaron al conjunto blanquiazul. Desde entonces, casi intocable. «Sí estuvo muy perseguido por las cartulinas amarillas –recibió 17–. En la primera parte del campeonato, era el que más faltas hacía. También es cierto que hubo algunas tarjetas injustas, porque parecía que los árbitros ya le colgaban la etiqueta de duro», explica. «Cuando se anunció que podía salir, la afición puso el grito en el cielo. La gente se identificaba con él. Era un tipo que tenía que estar en el campo siempre», corrobora.

El Granada había observado su rendimiento y se enteró de que el Sevilla tenía una opción de compra bastante módica sobre él. Estableció una negociación a tres bandas mediante la cual los de Nervión la ejercían para que los nazaríes les compensaran con un millón de euros. Así se quedaron en propiedad con el pivote. El Sevilla fijó un porcentaje en caso de venta futura del futbolista a un tercero.

Eteki comenzó el presente ejercicio como titular. Yangel Herrera todavía no estaba al mejor ritmo tras arrastrar una lesión en pretemporada y el entrenador escogió al camerunés como pareja de Montoro. Se estrenó en Villarreal, en aquel 4-4, del que no vivió los últimos compases. Fue sustituido en el minuto 69 por Ramón Azeez. El preparador vigués repitió la alineación en la siguiente jornada, frente al Sevilla. El equipo perdió 0-1 y Eteki también fue reemplazado en la segunda mitad. En esta ocasión, por Adrián Ramos, en la intentona infructuosa de remontada.

Tras su periplo en blanco, Eteki ha apretado y ahora buscará alcanzar su nivel cuanto antes. La ausencia de Montoro deja un vacío en el centro del campo por el que va a pelear con varios compañeros. En principio, la pieza que sí parece estable es la de Yangel Herrera, siempre que retorne en condiciones de su estancia con la selección venezolana. A su lado intentará situarse Eteki, aunque tendrá oposición en Max Gonalons. Su experiencia y trayectoria le dan papeletas al francés, pero tendrá que mejorar su condición física y, sobre todo, entender mejor el modelo rojiblanco. En ese aspecto, Eteki lleva la ventaja de conocer a la perfección lo que demanda Diego Martínez. Otra solución sería que Ramón Azeez volviera a una situación más retrasada junto a Yangel, dejando el espacio de conexión con el ataque para otro futbolista, bien Carlos Fernández o Antonio Puertas –lo que liberaría una banda para Vadillo, siempre que consiguiera recuperarse–.

Lo malo para el Granada es que Camerún sub 23, la selección de Eteki, tiene previsto incluirlo en la citación para la Copa de África, que se disputa en noviembre. Se iría en el parón, pero podría afectar a los partidos contra Valencia (fuera) y Atlético de Madrid (casa).