Wu Lei, la estrella china del Espanyol que quieren 'clonar' en el Granada

El sueño del presidente del Granada es 'clonar' esta operación. Son muchos los seguidores rojiblancos que se siguen preguntando por qué vino John Jiang a esta ciudad con afán de comprar el club. Hay quien, desde una visión corta, conjeturó con el posible afán de revalorizar la plaza y venderla luego al mejor postor, algo poco rentable mientras el equipo siga en Segunda división. Pero en el fondo, más allá de ciertas promesas incumplidas, el afán del empresario chino siempre estuvo en orquestar una metodología de trabajo entre equipos distintos en la que se mezclara el conocimiento adquirido entre Asia y Europa. Bajando el balón al suelo, implicaría el asentamiento de futbolistas de su país que realmente tuvieran un nivel aceptable para las exigencias de los campeonatos locales.

El de Wu Lei es un movimiento estratégico que va más allá de algunas intentonas rojiblancas hasta ahora con jugadores de perfil bajo, como ha pasado con el defensa Hao, enrolado en el filial nazarí. Implica gastos faraónicos, aunque hay mucho secretismo sobre el salario de Lei, que se movería entre los 8 y los 10 millones de euros según diversos medios, y acerca de la cuantía del traspaso. Inasumibles, en cualquier caso, para la economía del Espanyol. La gestión se hizo viable gracias a la contribución de las autoridades chinas, empeñadas en el inicio de este desembarco, y la explotación de sus derechos de imagen en aquel país para fórmulas de vanguardia. Las cifras en el aspecto de la mercadotecnia resultan mareantes y mejoran a las de cualquier crack mundial con amplitud, incluidos Messi y Cristiano Ronaldo. Este retorno justifica todo.

John Jiang busca el favor de su gobierno para impulsar la próxima acción de este tipo. Mientras tanto, pone a los ojeadores del grupo Hope a espiar a jugadores chinos que puedan alcanzar un desarrollo óptimo. En esa política se enmarca la llegada de Li Tenglong al Recreativo; y no será la última, al igual que van potenciando jóvenes valores en el Chonqging Lifan de la mano de Jordi Cruyff.

El Granada se ha beneficiado de operaciones de venta con componente asiático, como ocurrió no hace mucho con el portero Zixiang Wang, que se fue cedido en verano al Beijing Enterprises y ahora, en invierno, cerró su marcha al propio Chongqing. De hecho, pudo ser uno de los movimientos que dio liquidez tras aquel fin de semana famoso en agosto en el que no se pudo inscribir a Alejandro Pozo y el siguiente lunes sí sin mediar ninguna partida conocida de ingresos en otros aspectos.

En el futuro no se puede descartar que esta sea una vía más de que la entidad se financie mediante la pura formación, en el caso de que aterricen en las categorías inferiores y prosperen, o a través del pleno desarrollo en el primer equipo, si al futbolista le alcanza de veras. Esto y no especular con el valor del Granada parece el deseo real de Jiang.