Diego Martínez: «Espero que seamos nosotros mismos»

El entrenador apuntó que esperará a todos los que apuran para jugar, como Herrera y Soldado. «Los voy a esperar, pero no sé si estarán. Vamos a ver las últimas sensaciones, porque voluntad hay por recuperarse y arriesgar. Necesitamos la energía de todos. Que toda la gente de Granada se ponga su camiseta en casa, nos anime, nos contagie. Con esa rojiblanca horizontal seremos más fuertes. Espero un Nápoles de calidad. Más como local, con experiencia en estas competiciones. Es un grande de Italia. Hay que afrontarlo con personalidad, a pesar de las grandes diferencias que hay», esgrimió.

Es una situación para no creérsela. «Si me dicen cuando cojo el Granada que iba a estar aquí, pues no lo habría firmado ni el más optimista. El objetivo era llegar a diciembre sin que me cortaran la cabeza, era un banquillo caliente con los entrenadores. Es un momento único, histórico. Machís ejemplifica el crecimiento exponencial del equipo. Me hace sentir orgulloso lo que hemos crecido. Nos lo hemos ganado», regaló a su acompañante en la rueda de prensa.

Machís, por su parte, agradeció «la confianza del cuerpo técnico», lo que nos apoya. «Estamos felices de vivir estos momentos. Contribuyen todos los sacrificios que hemos hecho para llegar a disputar este tipo de partidos ante una gran escuadra», subrayó.

Diego insistió en algo: «Creo que las emociones tenemos que canalizarlas en ilusión, tener el foco en cada acción del juego. Sabiendo que desde ya esto es un éxito, intentar dar nuestro mejor nivel. Es lo que tenemos que tener en mente». Sobre la ventaja y cómo abordarla, se sinceró: «Si esto fuese un teatro, valdría con lo que uno quiere hacer como actor, pero hay otro enfrente con un plan. Queremos hacer un partido para ganar, pero también saber dar respuesta a lo que formule el Nápoles. Olvidarnos del otro partido, ir a ganar y contestar a lo que demande el rival». El carácter especial de la cita impregna a Machís: «El partido para mí, para mi familia, que es granadina, y para toda Granada es algo histórico. Es un orgullo para mí vestir esta camiseta».

Quedan 90 minutos, quizás una prórroga, tal vez penaltis. «Lo más importante es que sabemos que será un partido difícil. Tenemos que hacerlo perfecto para pasar la eliminatoria. Desde esa exigencia, queremos tener nuestra personalidad, parecernos a nuestra mejor versión, el equipo que hemos sido hasta llegar. Últimamente ni todas las alternativas del mundo pueden dar cobertura a las circunstancias adversas sufridas. Los que salgan lo harán bien, creo en el equipo. Espero que seamos nosotros mismos», apuntó Diego.

Machís ha cambiado mucho desde sus tiempos en Italia. «En Udinese tuve poca continuidad. Llegué al Granada, tuve confianza de todos, ayuda, y he llegado hasta aquí. Estoy contento de estar trabajando con este cuerpo técnico, aprendo muchísimo, y lo traslado al campo, para ayudar», abundó.

El técnico corrigió a un periodista italiano, que lo vio confiado. «Aquí nadie tiene euforia, ningún granadinista. Yo no dije eso. Lo que sí comenté es que tenemos las mismas posibilidades que el Nápoles de pasar después del 2-0, está todo abierto. Euforia, cero. Concentración, toda. Dificultad, máxima».

También le inquirieron sobre sus números defensivos, malos en España y buenos en Europa. «Ahí están los datos, pero hay que analizarlo en profundidad. No cambio los 30 puntos por los goles de menos que llevan otros por debajo. Hay un equipo por delante que lleva dos tantos menos encajados (el Betis). Significa que luchamos por ganar los partidos. Alrededor de 5 o 6 goles vienen de situaciones de ir perdiendo el partido y vamos a pecho descubierto por intentar empatar. Pero hemos tenido 15 porterías a cero en 40 encuentros. Transmitimos buenas sensaciones a nivel defensivo. Es nuestra realidad, intentamos mejorar, reconociendo que es un dato negativo», admitió.