El Dépor y el peligro de los rivales con continuidad del año pasado

Esto también se evidencia en el Dépor con Imanol Idiakez, que encima llega a la categoría con la inercia del ascenso y que ya se quitó el trauma la pasada jornada de haber empezado la Liga sin ganar. Evidentemente, los blanquiazules no se presentan con el lujo que llegaron a acumular en su día cuando rompieron con la modestia y lucharon por los grandes títulos nacionales. Ahora trata de recuperarse con un proyecto sereno que cuenta con una abundante masa social, ahora mismo muy conectada con el equipo. Quiere resurgir tras años complicados.

Una de las grandes diferencias con los anteriores contrincantes de los rojiblancos es que el Dépor en teoría disputará la posesión de balón a los anfitriones. Es un conjunto que construye desde atrás y que cuenta con futbolistas de buen pie, como Soriano, y centellas a la hora de driblar como Yeremay, el que más regates lleva de toda la categoría. Un joven canario que llegó de niño a la entidad y que quiere mostrarse al fútbol profesional. Su golazo fue clave en el reciente triunfo gallego.

Atrás, hay dos viejos conocidos. Ximo Navarro, nacido en Guadahortuna aunque nunca rojiblanco; y Pablo Vázquez, que formó parte del primer Granada de Diego Martínez, con escaso recorrido, pues no debutó en partido oficial. Delante, se ha reforzado, pero se mueve con libertad Lucas Pérez, que dejó en su momento al Cádiz en Primera para intentar sacar a su Dépor de la 1ª RFEF. Lo consiguió y ahora busca cerrar el círculo volviendo a la máxima categoría. A priori, no es el objetivo por su presupuesto, pero la Segunda a veces es imprevisible.