El camino del ascenso pasa por Portugal

El nuevo entrenador del Granada estuvo este fin de semana en Burgos, en un homenaje a Juan Gómez 'Juanito', en el que se disputó un partido de veteranos. De 62 años, Portugal, ha tenido una trayectoria intensa en el fútbol, tras formar parte del Real Madrid en sus tiempos como jugador. Es un preparador de método, con diversas publicaciones sobre su deporte, que pasa por abogar por un estilo de iniciativa con el balón, que ha ido modulando en sus distintas aventuras.

Inició su carrera en los banquillos como técnico del Arandina antes de dar el salto al filial blanco, entre 1997 y 1999, disputando la fase de ascenso a Segunda división, sin rubricar el salto de categoría. Arrancó la temporada siguiente en el Toledo, en Segunda, en el que sólo estuvo nueve partidos (el club castellano-manchego acabaría bajando) y luego apareció en el Córdoba en la campaña 03/04, como sustituto de Fernando Castro Santos, club en el que había sido director deportivo entre el año 90 y el 95, antes de ponerse el chándal. Salió del equipo califal a falta de dos jornadas, con el club en descenso, que se salvó al final con Pedro Sánchez Pedraza.

Volvió al Madrid y en diciembre de 2005 reemplazó a Juan Ramón López Caro al frente del Castilla, pero se marchó el verano siguiente para coger al Racing de Santander en Primera. Hizo un gran curso en el cuadro cántabro y lo dejó en mitad de la tabla. Surgieron las discrepancias y se fue para asumir la secretaria técnica del Madrid. Unió su estancia con la presidencia de Ramón Calderón. Regresó al Racing, al que llevó a la permanencia al final del curso de 2010. Renovó pero fue destituido en febrero de 2011 cuando entró la propiedad de Ali Syed, aun fuera del descenso.

En junio del 2012 emprendió su primera aventura en el extranjero, al frente del Bolívar. Ganó el Torneo Clausura pero llegó a un acuerdo para irse a Brasil y dirigir al Atlético Paranaense. Renunció cuatro meses después. La selección boliviana llamó a su puerta pero al final no firmó ante las discrepancias con la federación del país. Volvió a España, a Segunda, para enrolarse en el Valladolid, en octubre de 2015, con los pucelanos en descenso. Salió de abajo pero no es suficiente. Es cesado en abril tras sumar un punto de quince posibles, aunque estaba fuera del peligro.

Desde entonces ha tenido dos aventuras exóticas. Una en Argelia, en 2016, con el CS Constantine. Estuvo de noviembre a diciembre, pero lo abandonó por problemas de impagos. El verano pasado viajó a la India para enrolarse en el Delhi Dynamos. Allí quedó su última pista como entrenador. Se le ha podido ver en algún programa de televisión que analiza la Segunda.

Esta apuesta recuerda a la de la primavera de 2015, cuando el entonces presidente Quique Pina sorprendió a propios y extraños con el relevo del segundo técnico de aquella temporada aciaga, Abel Resino –a su vez sustituto de Joaquín Caparrós– para darle el mando a José Ramón Sandoval. Aquella medida buscaba el milagro de una nueva salvación en Primera que parecía una quimera, con el equipo penúltimo, a cuatro puntos de su meta, como ahora, sin tener que medirse a ninguno de los conjuntos que tenía por delante. El de Humanes lo conquistó en sólo cuatro encuentros. Portugal tiene cinco, aunque luego se sumiría en la eliminatorias. Cuatro citas más para alcanzar el 'Olimpo'.

Pedro Morilla se convierte en el decimoquinto entrenador que no concluye la temporada en LaLiga 1|2|3. Antes que él cayeron Lluis Carreras (Nástic, jornada 4), José Manuel Aira (Albacete, jornada 7), Luis Carrión (Córdoba, jornada 10), Luis Miguel Ramis (Almería, jornada 14), Juan Merino (Córdoba, jornada 17), Paco Herrera (Sporting, jornada 18), Curro Torres (Lorca, jornada 19), Rodri (Nástic, jornada 24), José Luis Martí (Tenerife, jornada 25), Jorge Romero (Córdoba, jornada 26), José Luis Oltra (Granada, jornada 31), Luis César Sampedro (Valladolid, jornada 35), Lucas Alcaraz (Almería, jornada 36), Gerard López (Almería, jornada 36) y él mismo.